GRENDEL: LA ENTREVISTA. PARTE 3 (de 4). Por Matt Brady, para Newsarama (2007) PARTE 1, PARTE 2.
Traducido por Frog2000.
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DEVIL'S LEGACY 2/2
NRAMA: Sigamos ahondando en la saga. En la actualidad, ¿cuánto tiempo ha transcurrido desde la muerte de Hunter? ¿Y qué concepto tiene la Sociedad en general sobre el personaje? ¿Existe algún personaje análogo que te venga a la mente y que puedas usar como ejemplo?
MW: “Devil's Legacy” tiene lugar unos 25 años después de los hechos descritos en “Devil by the Deed”. Me hace gracia que me preguntes por alguien que se parezca a Hunter, porque la verdad es que he intentado muchas veces pensar en alguien cuyos rasgos se le puedan asemejar. Y no lo he encontrado. A veces he intentado imaginar cómo podrían percibir los habitantes de ese mundo futuro a “Hunter Rose” y a “Grendel” (en especial cuando he intentado transmitir lo extrañas que se vuelven las cosas cuando en ese futuro aparece la clase militar de los Grendels), pero no he encontrado a nadie parecido. Quiero decir, después de su muerte, el nombre de Grendel confiere una especie de fastuosidad horrible. Así que por poner un ejemplo, el primero en el que suelo pensar es en Hitler, pero tampoco creo que se le parezca demasiado. Hunter no era un líder político o militar. Así que eso también deja fuera a Osama Bin Laden, a Atila el Huno, a Pol Pot, etc.
Por otro lado, si nos fijamos en una especie de criminal solitario como Jack el Destripador o Jeffrey Dahmer, tampoco me parece que encaje demasiado, sobre todo porque Hunter no es el típico psicópata. A él no le gusta infligir dolor ni tampoco se siente inclinado a la tortura (aunque sienta cierto placer al aplicarla), y tampoco le gusta el canibalismo o alguna de las otras neurosis en las que solemos pensar cuando nos acordamos de este tipo de asesinos. Así que en su lugar intento compararlo con algún gánster infame, alguien que por lo general se parezca más a lo que buscamos. Pero tampoco las tengo todas conmigo, porque esas figuras no suelen estar a la altura del legendario terror que provoca la sola presencia de Grendel. Supongo que podríamos intentar compararlo al revuelo que causó John Dillinger en los treinta. En la época de la Depresión la mayoría de esos malhechores tan sólo eran ladrones de poca monta que conseguían titulares dramáticos en los periódicos amarillistas. Y eso dio como resultado que a muchos de ellos se los engalanase con el término de “Robin Hood”, sobre todo gracias a su popularidad. Como si fueran atrevidos pícaros que no estaban de acuerdo con las corruptas autoridades de la época. Ninguno de los que viven en el mundo de Grendel se pensaría que los que forman su cuerpo militar son una especie de simpáticos sinvergüenzas. Y bueno, luego tenemos a varios de los jefazos de los bajos fondos: Bugsy Siegel, Meyer Lansky y similares. Se parecen un poco más al personaje de Hunter, pero seguimos sin dar en el clavo, porque en cuanto alcanzaban el poder, muchos de esos matones no se volvían a ensuciarse directamente las manos. Grendel utiliza su identidad secreta para aterrorizar a sus enemigos de una forma personal y reiterada, como si fuese una especie de oscuro ángel vengador.
Así que no… no se me ocurre nadie que pueda causar la misma impresión que causa Grendel tras la muerte de Hunter.
NRAMA: Bueno, y eso sin tener en cuenta que en el futuro de ese mundo se le sigue teniendo muy presente…
MW: Tienes razón. Sin duda todo el mundo sigue fascinado por sus atroces logros, al igual (supongo) que podría ocurrir en nuestro “mundo real”, aunque también sigue provocando una especie de sensación de peligro y pavor. Me imagino que en cuanto murió Grendel el mundo por fin pudo respirar aliviado. Pero tampoco conocían la maldad que con el tiempo terminaría engendrando su legado.
NRAMA: Y por otra parte, ¿ya tenías planeado que a partir de este punto ibas a expandir la saga de Grendel? Al empezar Devil´s Legacy, ¿tenías la intención de que los lectores captaran ese espíritu infeccioso, que se quedaran “infectados” inmediatamente por Grendel? Después de todo Christine apenas era capaz de barajar otra posibilidad antes de coger la máscara y el tridente y convertirse en Grendel. Parecía algo inevitable.
MW: En realidad tenía la certeza de que quería hacer evolucionar mucho más el concepto. Siempre quise tirar hacia delante. Pero es todo lo que sabía. Por supuesto, me encantaría poder asegurar que tenía un plan maestro y que todo estaba pensado desde el principio, pero sencillamente no era así. Lo edifiqué todo sobre la marcha. Eso no quiere decir que no hubiese una lógica detrás de tanta locura, pero realmente creo que fue un caso de… bueno, de acuerdo, y ahora ¿qué es lo próximo que voy a hacer? Cuando estudiaba en la Instituto de Arte constantemente nos mandaban hacer ejercicios que requerían que nos esforzáramos por estimular nuestra creatividad, ya que sólo disponíamos de los escasos materiales que podían encontrarse más a mano. En efecto, se nos pedía hacer algo con nada o casi nada. Pero obviamente, al hacer Grendel no me ocurre lo mismo. Siempre he tenido bastante en cuenta las anteriores sagas, pero la experiencia que adquirí en esas clases me resultó muy útil a la hora de generar ideas sobre la marcha, para poder así hacer Arte innovador y reinventarme continuamente. En respuesta a la segunda parte de la pregunta, claro que sí, a lo largo de esta épica expansión del universo de Grendel ha habido momentos en los que he pensado que el personaje debía ser una entidad distinta a lo que ha terminado siendo: “el demonio de la mediocridad de la Sociedad,” tal y como lo denomina Christine al final de “Devil by the Deed.” Pero como también ocurre con cualquier otro aspecto de esta historia, rápidamente me pude dar cuenta de que era una idea bastante limitada, demasiado específica... y al final también podía ser incluso demasiado aburrida. Así que en mi opinión Grendel no trata sobre “quién” o sobre “qué”, sino sobre “¿por qué?”
Antes comentabas que en realidad no transcurría demasiado tiempo hasta que Christine se decidía a utilizar métodos extremos para vengar el secuestro de su hijo. En parte, creo que lo que ocurría es que se encontraba levemente “contaminada” por la presencia de Grendel, que la había dejado bastante hecha polvo a lo largo del transcurso de su vida. De hecho, supongo que escribir el libro (al que tituló Devil by the Deed) era obviamente una especie de intento de expulsar a este demonio omnipresente. Pero lo que de verdad la hacía reaccionar era toda esa ira embotellada que es la que termina conformando su personalidad. Y… creo que eso es lo que hace que sea diferente de Hunter. Hunter no era una criatura que estuviese gobernada por la rabia. De hecho, al sucumbir a la furia absoluta fue finalmente cuando lo perdía todo, dando como resultado su muerte. Pero la situación de Christine ya es harina de otro costal. Su rabia es lo que la llena de energía, aunque con el tiempo también termina consumiéndola. Creo que son esas pequeñas diferencias entre un Grendel y otro lo que hace que te preguntes ese gran (puede que el mayor de todos) “¿por qué?” al que aludía antes.
NRAMA: En el relato de Chris la narrativa casi adoptaba un estilo periodístico (algo que ahora se ve muy raramente, pero que a finales de los ochenta era bastante común gracias a Miller, a ti y a algunos otros artistas más). Me parece bastante lógico, ya que Chris es escritora, pero ¿querías que los lectores pensaran que estaba escribiendo su diario de una forma anónima? ¿Y por qué escribir un diario en vez de algo más sencillo? ¿Tenías ya pensado que Brian terminaría leyendo lo que ella había dejado por escrito?
NRAMA: ¿En serio crees que hoy en día ya no se estila ese tipo de narrativa? Yo sigo usándola bastante a menudo... ¡supongo que eso me convertirá en alguien de la “vieja escuela”! De cualquier forma tienes razón cuando apuntas que Chris era escritora, porque es otra de sus conexiones con Hunter. De nuevo volvemos a ese “¿Por qué?” Si nos hacemos esa pregunta sobre Hunter, creo que el personaje se basa en una maquiavélica filosofía de dominación que él es muy capaz de llevar a cabo. Pero las motivaciones de Chris se basan mayormente en que se ha visto obligada a hacer lo que hace. Suponía que el lector necesitaba poder ver, leer y sentir el castigo emocional y la furia de Chris de una forma mucho más palpable que la arrogancia “por encima de todo” de la que hacía gala el personaje de Hunter. Como has apuntado antes, ha sido recientemente cuando he empezado a sentirme más a gusto mostrando los procesos internos de la mente de Hunter, procesos registrados en sus propias entradas en el diario. En parte creo que es porque supongo que Hunter está por encima de lo meramente humano. Si te das cuenta siempre he tenido mucho cuidado a la hora de mostrar por escrito la auténtica forma de escribir de Hunter. Porque supongo que él escribe de forma mucho más realista de lo que sería humanamente posible. Verdaderamente creo que escribe mucho mejor que yo. Y esconder esa habilidad de una forma misteriosa ayuda mucho a crear la distancia necesaria que demuestre su superioridad. Pero como ya has apuntado, necesitaba que el lector pudiese ver por sí mismo la completa caída de Chris hacia la locura. Al principio parece alguien perfectamente normal y equilibrada, pero gradualmente va perdiendo la cordura y empieza a grabar todo el proceso en su propio diario. Escribir en un diario y tomar notas forma parte de la conversión en escritor, así que tiene mucho sentido que Chris escriba un diario de una forma tan pródiga. Claaaro… a veces el texto cambia entre el presente y el pasado, pero es culpa de su estilo narrativo. En realidad creo que sólo muy de vez en cuando hace ese tipo de cambios. De hecho, si revisas sus últimas entradas (alrededor de los capítulos 11 y 12), verás que en realidad está escribiendo sus últimos pensamientos y su despedida antes de afrontar su última batalla con Argent. Creo que ambos escritores (tanto Hunter como definitivamente Christine) son el verdadero Legado del Diablo (“Devil's Legacy”). Creo que ni Chris, ni tampoco Brian, habrían sucumbido a la influencia de Grendel si no hubiesen mirado directamente al corazón de la bestia.
NRAMA: Supongo que si hablamos de la transformación que sufre Chris, lo que ocurre es que muta en Grendel por completo, pero aún así ¿crees que es ella la que abraza el legado de Grendel o es Grendel quien la posee a ella? Después de todo la pérdida de su hijo Anson parecía un elemento completamente secundario en el duelo que empezaba a perfilarse entre Chris y Tujiro…
MW: Claro, después de un tiempo te empiezas a preguntar si después de todo seguirá teniendo presente a su hijo ¿no crees? Porque de repente la historia trata más sobre su venganza que sobre la pérdida que acaba de sufrir. Y lo más triste de todo es que ni siquiera ella es capaz de darse cuenta. Está tan convencida de que es bueno administrar su propia “justicia”, de que el resto del mundo son demasiado idiotas y estúpidos, que no se da cuenta de que ha cruzado la línea y se ha convertido en aquello que había querido evitar durante toda su vida: un Grendel.
NRAMA: En mi opinión la historia es tremendamente interesante, porque muestra claramente que Chris no es como Hunter. Y por mucho que se esfuerce creo que nunca llegará a serlo. Es demasiado humana. Claro, también confía bastante en sus propias acciones y en su motivación para realizarlas, pero... sigue sin ser Hunter. ¿Es algo que querías recalcar? ¿Crees que cualquiera que intente asumir el cargo después de Hunter tan sólo será un pálido reflejo del original?
MW: No tanto un pálido reflejo como alguien… diferente. Como ya he mencionado antes, a ojos del lector Chris es tan humana porque tenemos la oportunidad de ver directamente sus pensamientos. De nuevo creo que me convenía guardar ciertas distancias con el personaje de Hunter. Porque Chris es todo corazón, un rasgo que en Hunter no aparecía por ninguna parte. Puede que haya muchos fans que se piensen que Brian fue uno los Grendels más débiles, cuando en realidad era uno de los más poderosos. Es el único -el único- que derrota a Grendel con su sacrificio (o al menos acaba con él por un tiempo.) Porque todos sabemos que el diablo no puede morir. Por otro lado, el Grendel que ha ejercido una mayor influencia ha sido uno al que nunca se le ha visto haciendo cabriolas y vestido con una variante del traje en blanco y negro: Orion Assante. Porque no nos olvidemos de que el personaje de “Orion” ya se puede encontrar en la mitología griega. Era el cazador.
NRAMA: De nuevo saltamos hacia delante… mejor volvamos sobre la historia de Chris. ¿Crees que en cierta forma y desde el punto de vista de Argent, el regreso de Grendel era inevitable? El Lobo daba a entender muchas cosas... pero realmente no parecía estar... demasiado sorprendido.
MW: Claro. Cuando finalmente se encontraban en la azotea durante el clímax de “Devil by the Deed”, Argent había empezado a pensar en Grendel como en su antítesis, incluso aunque este personaje haya sobrevivido durante Siglos a una existencia brutal y torturada antes de toparse con el hombre-demonio. Lo considera su némesis. Hunter terminaba muriendo y Argent se quedaba paralizado, por lo que el lobo notaba algo así como que no había colmado del todo su razón de ser. Sabía que debería haber muerto en la misma batalla donde fallecía Hunter. Estas dos fuerzas opuestas deberían haberse exterminado la una a la otra, pero él se quedó inválido, y su furia y sus objetivos nunca llegaron a una resolución. Así que cuando Chris se convertía en Grendel, Argent lo notaba de inmediato. Porque en ese punto estaba intentando hacerse a la idea de que Grendel es una fuerza sobrenatural de la que emana algún tipo de aura que Argent es capaz de detectar. Si te fijas en su comportamiento, casi podríamos asegurar que Argent está esperando la resurrección de Grendel. Que casi, casi... está contento.
NRAMA: Exacto, eso era lo que intentaba decirte. El regreso de Grendel parece no aterrorizarle demasiado…
MW: No, no mucho.
NRAMA: Dicho esto, y teniendo en cuenta la frase de que “nadie te conoce mejor que tu enemigo”, supongo que Argent entiende mucho mejor que Chris todo lo que significa ser Grendel, ¿no es cierto?
MW: Bueno, sin duda tiene un conocimiento mucho más real sobre lo que significa ser Grendel. Pero también tenemos que darnos cuenta de que Hunter no fue capaz de acabar con Argent. Y Christine sí que terminaba haciéndolo. Y lo hace gracias a su personalidad airada, que funciona como su verdadero motor. La furia de Hunter es capaz de dejar inválido a Argent por un tiempo, pero la de ella le basta para hacer frente a la latente ira del lobo.
NRAMA: En ese punto, justo al final de “Devil's Legacy”, ¿habías planeado la historia de Tujiro y el resto de acontecimientos futuros?
MW: Al igual que ocurre con gran parte de la mitología de Grendel, la mayoría de esas historias ha ido construyéndose sobre la marcha. Tujiro me parecía alguien cada vez más fascinante a medida que iba progresando en la saga. Es una criatura absolutamente decadente, es el hambre y el ansia de consumir llevados hasta el extremo. Cuando apareció en la serie por primera vez, sabía que lo veríamos de nuevo. Todavía no tenía muy claro todo el ambiente futurista de su historia, y sin duda no sabía lo importante que resultaría siendo al final de la saga.
NRAMA: Chris empieza a parecerse a Tujiro durante la primera parte de la historia, algo que explica bastante bien lo que está ocurriendo en ese momento: cada vez era menos ella misma y más un Grendel. Pero al mismo tiempo parte de su personalidad también se mezcla con la de Tujiro, ¿no es cierto? ¿Crees que finalmente el cazador se convierte en presa?
MW: Bueno, está transformándose de continuo, interpretando un papel, al igual que Tujiro. Adopta una extravagante personalidad pública, una “identidad secreta” parecida a la de su rival. Con el paso del tiempo incluso le preparará trampas, algo que obviamente él ya había estado haciendo antes. Incluso se podría decir que también ha encontrado una víctima con la que poder alimentar a Brian. Eso facilitará que todos transiten el camino de la condenación. De hecho, creo que es uno de los temas recurrentes en Grendel: al final la violencia consume al que la utiliza y termina convirtiéndolo en lo que más odiaba.
NRAMA: ¿Y cómo crees que encaja el dibujo de los Pander en todo este mejunje? Supongo que en aquella época serían condenadamente jóvenes y se ve que sufrieron una evidente evolución entre el primer número que dibujaron y el último.
MW: La verdad es que yo no orquesté gran cosa su forma de narrar. Como acabas de decir, ambos eran muy jóvenes. Creo que Arnold sólo tenía 19 años y Jacob había cumplido los veintiuno. Por supuesto, se puede ver una evolución en su trabajo. No parece que la gente se dé cuenta del enorme trabajo artístico que hay en un solo ejemplar de cada uno de esos números. Cuando tienes entre manos una saga que transcurre durante una docena de números o algo así, como ocurría con Legacy, la historia fuerza a los dibujantes para que marchen en direcciones que ni siquiera habían considerado al empezar la obra. En el caso de los Pander, su alta estilización angular empezó a fundirse con un elemento que poseía más ferocidad y energía cinética, y tuvimos la suficiente suerte como para que se ajustase a la perfección a los rasgos psicológicos de la historia.
También empezaron a descubrir un lado más inconformista, por lo que quisieron involucrarse más en la serie. Más o menos a mitad de recorrido empezaron a sufrir problemas por el entintado. Les sugerí que colaborar con un entintador era necesario, porque la serie era mensual, pero me dijeron que de ninguna manera, que en esa temprana etapa de su carrera eran perfectamente capaces de manejarse por sí mismos. Realmente me gustaba mucho lo que Jay Geldof nos ponía sobre la mesa, me gustaba el aspecto final que tenían los números, pero de nuevo, los Pander empezaron a desplegar las alas y quisieron ser más independendientes. Y al final todo funcionó muy bien, porque siguieron su propio camino y si te fijas en su carrera a lo largo de todos estos años, sin duda creo que han producido un grueso de trabajo bastante ecléctico.
NRAMA: Obviamente, si los Pander se estaban divirtiendo con algún personaje creo que ese era el de Wiggins. Háblanos sobre su origen ¿cuál fue tu inspiración?
MW: Esa es una buena pregunta, porque me ofrece la oportunidad de hablar un poco sobre todo el proceso creativo. Como ya he comentado antes, en mis guiones prefiero escribir el argumento y los diálogos, todo junto. Eso significa que en lugar de elaborar todo el guión de una forma detallada, escribo un argumento específicamente para cada página en donde describo todas las acciones que tienen lugar en dicha página, así como algunos fragmentos del diálogo. En vez de darle al dibujante un guión canónico, dejo que sea el dibujante quien elija el ritmo visual. En cuanto la página está dibujada al completo me baso en el dibujo acabado para entregar el guión finalizado, con diálogos y textos incluidos. A menudo trabajar de esa forma me inspira mucho más, y también me hace descubrir rarezas en la personalidad de los personajes, ciertos patrones en su sintaxis y en su lenguaje con los que poder jugar, metáforas y simbolismos que necesariamente no había considerado en la etapa en la que estaba realizando el argumento. De esa forma soy capaz de visualizar personajes y situaciones desde una óptica que hasta entonces tan sólo me resultaba abstracta y que luego parece estar descrita de forma más concreta, por lo que tengo mayor libertad y diversión creativa. Este proceso me ayuda a mantener toda la frescura y la energía. Siempre he creído que cuando colaboras con otro artista esta forma de escribir es mucho mejor, porque como he mencionado antes quería tener la experiencia de colaborar con otro dibujante y dejarle a él el aspecto visual de Grendel. No sólo quería ver cómo interpretaban otros artistas lo que yo tenía en mente, sino que sigo creyendo que ofrecer esa libertad es una especie de obligación moral. Si quisiera tener el férreo control del diseño artístico al que obliga un guión completo, entonces (como dibujante) tendría la sensación de que debería haber dibujado esa condenada cosa yo mismo. Pero si hablamos de guiones completos y dirección de colaboradores podemos fijarnos en otros autores como Alan Moore que obviamente han elegido el polo opuesto (y logrado verdaderos éxitos), pero esa no es mi forma de hacer las cosas.
Dicho esto, la creación de Wiggins fue un maravilloso accidente creativo que surgió gracias a, de nuevo, la colaboración con otros autores. Creo que en el guión de los primeros capítulos de Legacy que les entregué a los dibujantes no aparecía ningún rasgo del policía que estaba hablando con Argent. Supongo que en el argumento escribí algunos rasgos estereotipados, tanto sobre su apariencia como en cuanto al papel que iba a desempeñar el personaje en la historia. Bueno, pues cuando me llegaron los lápices de los Pander, los hermanos habían reformulado a ese policía que yo había sacado de un cliché y lo habían convertido en una versión muy distinta e intrigante (casi, casi tenía la apariencia de David Bowie), y lo más extraño de todo, ¡sin razón aparente le pusieron una prótesis cibernética en el ojo!
NRAMA: ¿En serio que fue de esa forma? Pues acababa jugando un papel muy importante en esa historia y en la de Brian...
MW: Bueno, supongo que lo que hicimos fue coger ese destello de creatividad e intentar potenciarlo. Al final el Capitán Wiggins se convertía en uno de los personajes principales de esta saga y de la siguiente, y también de la que seguía a esa. ¡Fue una de esas sorpresas que de vez en cuando surgen cuando colaboras con otros artistas!
NRAMA: ¿En qué momento crees que Christine le cedía definitivamente todo el control a Grendel? Después de combatir contra Tujiro parecía que estaba empezando a librarse de él, por lo que redactaba una entrada en el diario donde aseguraba que Grendel había muerto, pero entonces... alguien atacaba a Brian y Grendel parecía surgir otra vez como respuesta... ¿En qué momento crees que perdía definitivamente el control?
MW: En realidad, cuando ella se estaba preparando para el combate contra su adversario (su intención era la de atraer a su enemigo Tujiro al apartamento de Brian) ya se encontraba más o menos al límite. Quiero decir, ¿es que no tenía la certeza de que la pelea que iba a librar a continuación podría arruinar absolutamente ese lugar, la casa del hombre al que ella estaba intentado proteger? Pero en ese momento ya no le importaba nada. Lo único que ansiaba era entrar en combate. Después del mismo creía que ya había logrado su propósito y que podría dejar atrás toda esa violencia y las acciones radicales que había llevado a cabo hasta ese momento.
Pero tienes razón, en cuanto se enfrentaba personalmente a la latente brutalidad del mundo era cuando adoptaba de inmediato y una vez más a Grendel. Es como si ella fuese una adicta. Aunque ocultase bastante lejos su “alijo” más preciado –esto es, el tridente-, sabía perfectamente dónde poder encontrarlo, y en cuanto se veía invadida por la ansiedad lo enarbolaba para poder abrazar así de nuevo a Grendel.
NRAMA: El número siguiente, en el que Brian recibía una paliza, estaba dibujado sin palabras y mostraba la idea de que...
MW: Fue donde enseñamos que ella ya se encontraba irremediable y totalmente perdida.
NRAMA: Para el lector ese número resultaba impresionante...
MW: Claro. Hasta ahora ella seguía actuando por inercia mientras al mismo tiempo su instinto maternal se había quedado completamente destrozado. Su forma de vengarse del rapto de su hijo, aunque había sido absolutamente extrema, por lo menos era medianamente comprensible. El dolor maternal que estaba sintiendo la había forzado a realizar actos violentos y extraños como venganza. Pero cuando veíamos lo que ocurría en el siguiente número, en el que rastreaba, aterrorizaba, torturaba y por último asesinaba a alguien de una forma metódica (aunque también era por venganza, esta vez el personaje no nos caía tan simpático), entonces nos dábamos cuenta de que definitivamente había enloquecido. Había perdido sus últimos rasgos de humanidad y se había convertido en Grendel por completo. Y el número silencioso nos lo confirmaba del todo. Casi es como si no fuese a volver a ser ella misma nunca más. Sus prolijos análisis y explicaciones se habían esfumado. Ahora era una criatura que ejercía la violencia directamente, y los pocos textos que aparecían en ese número tan sólo servían para confirmarnos que sus acciones las estaba realizando de una forma impasible, sin alma. Al inicio de la cacería había dejado escrito en la primera página del diario: “En cuanto a Dominic Riley…” Y en la página final, según se estaba cerniendo sobre el cadáver mutilado sangrientamente, su comentario era: “...y finalmente conseguí acabar con él.”
Siempre he estado muy orgulloso de ese número, porque creo que en él conseguí las metas narrativas que me había propuesto de una forma muy satisfactoria. Y además me parece otro ejemplo de lo cómodo que estoy trabajando con el estilo de escritura que suelo utilizar. Como ya hemos hablado antes, en ese momento los hermanos Pander habían alcanzando su propio estilo artístico, así que en ese número les lancé una audaz y desafiante propuesta y ellos pusieron toda la carne en el asador y consiguieron un jodido “home-run”. A diferencia de lo que ocurría con los guiones de los números anteriores, en el argumento de ese capítulo no estaba detallado todo lo que estaba ocurriendo en la página, lo que significa que como suelo hacer otras veces no había especificado las cosas de una forma estructurada. En su lugar había descrito todos los acontecimientos que ocurrían en una larga parrafada sin editar, y dejé en manos de ambos hermanos el ritmo de lo que estaba ocurriendo según ellos quisieran encajarlo. Y creo que lograron hacer algo magnífico.
THE DEVIL INSIDE
Se podría decir que la suya fue la más trágica de todas las historias de Grendel. Brian Li Sung era el amante de Christine Spar. Disfrutaron juntos de muy poco tiempo, pero su relación había sido muy ardiente. Aunque interpretaba un papel clave en “The Devil's Legacy”, Brian tuvo su propia oportunidad de abrazar al diablo en “The Devil Inside”, una colaboración entre Matt Wagner y Bernie Mireault.
A diferencia de Hunter Rose o Christine, lo que hacía que la historia de Brian fuese más trágica era que él no estaba buscando a Grendel, sino que este lo encontró durante su época de luto por Chris, cuando sufría su hora más aciaga.
Newsarama: Vayamos un poco hacia el futuro y hablemos sobre el capítulo de Brian. Como ya te podrás figurar, a estas alturas de la serie yo ya estaba bastante enganchado, así que me gustaría preguntarte lo siguiente: ¿cuándo decidiste que Brian sería el siguiente Grendel? ¿crees que al crear el personaje ya estaba “marcado” y lo dejaste en un aparte esperando el momento, o en realidad todo formaba parte de una idea más orgánica que fue surgiendo según te encontrabas trabajando en la historia de Chris? ¿Querías que su amante fuese el siguiente en seguir el mismo camino?
Matt Wagner: No, creo que no estaba muy seguro de que Brian iba a estar condenado sin remedio a convertirse en el siguiente diablo. De nuevo, mi tendencia era la de dejar que la historia se desarrollase y fluyera de una forma bastante orgánica. Ahora, lo que sí que sabía a ciencia cierta es que Chris iba a morir (vamos, esto es una historia de Grendel… ¡casi todo el mundo va a morirse!) y también sabía que además de sus diarios necesitaba a un personaje que actuase como conducto emocional, alguien con el que ella pudiese hablar, compartir el dolor que le estaba produciendo todo lo que estaba experimentando, y que sirviese como ancla y ayuda para aferrarse a la sensación de humanidad que empezaba a desprendérsele. Y según continuaba con la historia, me pareció obvio que Brian debería heredar el manto. En cierta forma fue porque los dos estaban demasiado próximos... al final él era lo más próximo a un verdadero amigo que tenía Chris, y por eso fue elegido como tercer receptor de los diarios privados de Hunter, esos registros aparentemente malditos de la encarnación del mal. Todos los que entraban en posesión de los diarios, al final acababan siendo poseídos por Grendel. Así que si lo miramos desde esa perspectiva, supongo que podría decirse que Brian estaba condenado desde el mismo momento en que conoció a Christine. Pobre imbécil.
NRAMA: Y de nuevo era una nueva historia con un nuevo tono. Considerando que “Devil's Legacy” fue un thriller psicológico con elementos de ciencia ficción, acción y aventura, en comparación “Devil Inside” fue algo... brrr... más claustrofóbico. ¿Crees que era una respuesta creativa a la amplitud que habías conseguido en Legacy?
MW: ¡Absolutamente! ¿Recuerdas cuando he dicho que parte del placer de trabajar con otros artistas lo ofrece el poder experimentar diferentes puntos de vista? Bueno, no quería limitarme de ninguna de las maneras. Si te fijas en el material de los Pander, creo que tiene cierta similitud con el aspecto de diseño a la última de “Devil By The Deed”. En realidad, los dos estilos son muy, muy diferentes entre sí, pero creo que la transferencia entre uno y otro no chirria demasiado. En “The Devil Inside” quería golpear alguna fibra emocional. Quería enseñarle al mundo entero que nunca sabría cómo iba a ser el siguiente Grendel. Ya sabes, hace poco me he quedado bastante intrigado por la enorme controversia que ha desatado el final de la serie de los Soprano. Una de las críticas que he leído en alguna parte argumentaba que esa era la forma que tenía David Chase de recordarle al espectador de que este era su programa y que nunca se había encontrado demasiado cómodo con toda la expectación que había ido generando. Bueno, tengo que decir que “The Devil Inside” fue mi versión de esa situación. Era yo diciéndole al lector: “mira, esto va a ser una serie que se toma en serio mi credo artístico personal. Si estás dispuesto a abrazar lo inesperado, entonces puedes subirte a bordo.” En aquel momento también sabía que iba a tener que romper el ciclo de los anteriores arcos argumentales. Si mi intención era la de que mi serie fuese tan atrevida como impredecible, entonces tenía que deshacerme de la temática de “siguiente persona en la fila” que recogía el testigo de Grendel, antes de que se volviese un maldito tópico y… ¡agh!… ¡algo completamente predecible!
NRAMA: ¿Y por qué elegiste a Bernie como dibujante? ¿Dónde lo conociste y qué te llevó a pensar que sería una buena elección para que hiciese el dibujo del siguiente capítulo de Grendel?
MW: Todo comenzó cuando Bernie me mandó un correo en el que decía que me odiaba.
NRAMA: ¿En serio?
MW: En realidad fue una muy genuina y bonachona carta en la que me contaba todo lo que me odiaba. Mira, nuestras carreras habían empezado al mismo tiempo y parecía que en general, ambos exhibíamos el mismo tipo de ideales estéticos (en mi caso, específicamente en Mage y en el de Bernie en el incipiente Mackenzie Queen). Aún así, parecía que mientras a mí todo parecía irme bien y era aclamado por todo el mundo y estaba triunfando profesionalmente, Bernie continuaba esforzándose en su estudio de Montreal en una relativa oscuridad. En la carta me comentaba que por lo general solía atacar mi trabajo cuando estaba con sus amigos, que censuraba mis diseños y dibujos, etc... hasta el día en que sus amigos le replicaron: “Hey, ¿qué problema tienes con este tío?” Bueno, aparentemente ese comentario le chocó mucho, y en cuanto se sentó y empezó a reflexionar decidió que todo se debía a que estaba bastante enfadado en general. Terminó enviándome una carta junto con una copia de lo último que había creado: una historia sobre un hombre de la calle que se convertía en un super-héroe apodado The Jam. Jesús, me impresionó muchísimo. Me encantó. Y por supuesto, pude ver las simpáticas habilidades que compartíamos Bernie y yo e inmediatamente decidimos que él sería el artista perfecto para el siguiente arco argumental. Si quería hacer un verdadero cambio en cada saga, entonces él era el tío adecuado para llevar a cabo dicha tarea.
NRAMA: ¿Y qué tal resultó la experiencia de trabajar con él?
MW: Al final todo funcionó de perlas: el cambio enganchó a mucha gente. Como sólo había cogido a otro equipo artístico para la serie además de a Bernie o a mí mismo, creo que muchos lectores asumieron que en el futuro este sería el estilo habitual. De hecho… ¡ja! Me encanta esa historia... incluso recibimos una carta en la próspera columna de correo que habíamos incluido en la serie llamada Grendel's Lair en la que podía leerse: “Querida Diana, ¡Bernie debería largarse a tomar viento fresco!” Estaba escrita a mano con lápiz por alguien obviamente muy joven, y debajo estaba firmada por unos diez o doce chavales. Bernie y yo solíamos reírnos con la imagen de esos chicos sentados en una esquina vendiendo limonada, aunque en realidad lo que estaban haciendo era atraer a otros chavales con la excusa de la bebida para que firmasen en su campaña de “Echad a Bernie”. Esa carta estuvo decorando mi mesa durante años.
Bueno, tampoco tenemos ni que comentarlo, pero sencillamente Bernie limpió su conciencia a base de bien gracias a la dichosa carta. ¡No se esperaba que yo le iba a llamar para ofrecerle un trabajo! Y ocurrió algo incluso más extraño: poco tiempo después me enamoré de una chica de Montreal y con el tiempo terminé mudándome allí para vivir con ella (al final terminamos casándonos.) Como resultado, Bernie y yo seguimos siendo buenos amigos y al final incluso hemos terminado compartiendo estudio. Este es un pequeño jodido mundo... como el de los cómics.
NRAMA: Ciertamente lo es. Y al parecer el Universo de Grendel también se ha mantenido compacto durante todos estos años...
MW: Claro, hasta cierto punto...
NRAMA: Como has comentado antes, muchas de las cosas que pudimos ver en Legacy fueron de alguna forma el producto de los tiempos que se estaban viviendo entonces, y me gustaría saber si con este arco argumental ocurrió lo mismo. Tanto si hablamos sobre la historia como sobre el enfoque artístico de Bernie, creo que “Devil Inside” se podría hermanar con Arkham Asylum, Big Numbers y otros trabajos... experimentales... de la época.
MW: Claro, pero tampoco creo que necesariamente me influyesen todas esas obras. Es más un caso de sincronicidad creativa.
NRAMA: O de zeitgeist. El estilo de dibujo se movía en esa dirección. En esa épocas había mucha pasión por los trabajos de Bill Sienkiewicz y Dave McKean, casi como si fuese una reacción a los años de George Perez y Romeo Tanghal, de John Byrne y del preciso entintado de Terry Austin...
MW: Claro, puede que flotase algo en el ambiente, se llevaba mucho esa determinada estética en el mundo del cómic. Los bordes del mainstream se estaban desbordando y se estaban rompiendo todos los límites. Además, si nos fijamos en la política global, aquellos fueron años de paranoia. Reagan seguía en el poder y la Guerra Fría se encontraba en pleno auge. La turbia participación de América en el escenario internacional estaba en boca de todos. Eso nos había hecho adoptar un tono oscuro, y con toda la razón.
NRAMA: Antes nos hemos adentrado en la cabeza de Brian, ¿cuáles fueron las grietas que permitieron que Grendel entrase en ella? Por supuesto, al final de Legacy el personaje estaba guardando luto, pero al comienzo de “Devil Inside” se encontraba también muy dañado y vulnerable, listo para ser asimilado. Fue un gran cambio desde que lo vimos en los números anteriores por primera vez, cuando conoció a Chris…
MW: Cuando conoció a Chris y el resto de su mundo, Brian se sentía fuera de onda. La idea se me ocurrió después de uno de mis primeros viajes a la Costa Oeste. Crecí en medio de la Costa Este y había pasado la mayor parte de mi juventud en entornos algo menos urbanos. Así que me chocó mucho y también me intrigó lo que pude ver al viajar por primera vez al Oeste y comprobar cómo eran las ciudades costeras “de izquierdas”, en especial San Francisco. Siempre me había imaginado que la vida urbana sería algo mucho más duro y áspero. Encontré que “sofisticado” significaba una cosa en Nueva York y otra muy diferente en San Francisco. Eso por no decir que las ciudades de la Costa Oeste son más amistosas, resplandecientes y soleadas, pero estoy bastante seguro de que el lugar donde están situadas es lo que en gran parte marca la diferencia. Intenté imaginarme cómo sería coger a alguien de San Francisco y colocarlo solo e insatisfecho en mitad de Manhattan. Añade un pequeño Grendel a la mezcla y entonces tendrás el cómo-se-hizo de “The Devil Inside” Y ese es el motivo de que Brian parezca alguien bastante estable cuando lo conocemos por primera vez y luego rápidamente se encuentre caminando al borde, pero también tenemos que acordarnos de cómo se encontraba al final de Legacy: porque durante la saga ha visto y experimentado tal nivel de violencia que cualquiera e n su lugar también perdería la cordura. Además, también ha aprendido que los vampiros y lo sobrenatural son algo aparentemente real. Y encima ha tenido que sostener el cuerpo desgarrado y ensangrentado de la mujer que amaba entre sus propios brazos. En ese momento está bastante más ido de lo que aparenta, y de repente… le llega una carta póstuma de Chris en la que le indica dónde se encuentran los diarios de Hunter. Y como suele decirse, eso era todo lo que ella le había dejado, tanto literal como figuradamente.
NRAMA: Si, toda esa sensación morbosa… Vale, de ahora en adelante hablaremos sobre el diseño de la serie. No se puede negar que en lo referente al diseño eras alguien tremendamente creativo, pero en esta saga estaba colaborando con Mireault... algo que hacía que se rebasaran los límites de la serie, como si se hubiese materializado un tercer creador que estaba compuesto por vosotros dos. ¿Te acuerdas de quién fue el responsable de lo que aparecía en las notas y en el "Grendelspeak" que se incluía en la parte inferior de las páginas? Parece como si no fuese uno de los elementos diseñados por Bernie, sino que hubiese sido una especie de sorpresa negativa surgida en el momento en el que las páginas te empezaron a llegar acabadas...
MW: No, en realidad esa era la idea. Tenía más claro que en otras ocasiones lo que quería hacer con la historia. Por supuesto, sólo tenía tres números de duración para llevarlo a cabo, y eso hizo más fácil que la historia y el diseño acabaran siendo como yo quería. Sabía que Brian ya se encontraba condenado, porque así suelen ser las historias de fantasmas, afrontémoslo, esa es la verdad. También había tenido la idea de la doble voz ensamblada narrativamente desde el principio. ¿Qué puedo decir? Claro que estás en lo cierto. Todo lo que surgió de esa colaboración está muy, muy elaborado. Creo que en una larga letanía de emocionantes y, a menudo, muy fluidos trabajos artísticos en equipo, “The Devil Inside” destaca entre toda la multitud.
NRAMA: Llegó la hora de la gran pregunta, y la verdad es que no me gustaría que te la tomases a mal, pero… cuando releí esta saga, a mitad de camino me dije: “Grendel” aparece bastante livianamente en la historia, porque este guión trata más sobre Brian totalmente hecho polvo, y por eso ha creado una personalidad en su cabeza, porque su mente intenta desesperadamente mantener unidos los pocos fragmentos que quedan de su psique, casi como si se estuviese engañando a sí mismo con la idea de que “Grendel” es real. Me da la sensación de que probablemente no estarás muy de acuerdo, pero aún así me gustaría decir que como mínimo Brian era un anfitrión muy, muy débil para poder contener a Grendel. Creía que Grendel sería más exigente…
MW: No, por supuesto que no me lo tomo a mal. Es lo que se suponía que tenías que sentir. De nuevo, creo que a lo largo de toda la serie de Grendel se puede palpar cierta ambigüedad, pero en este caso también existía de una forma más concreta respecto a lo que se estaba contando. Claro… ¿existirá realmente la “fuerza” Grendel o sólo es algo que está ocurriendo en la cabeza de Brian porque se está volviendo completa y jodidamente loco y paranoico? Ciertamente, puede que esté desarrollando una esquizofrenia pronunciada que le permita / obligue a convertirse en dos personajes diferentes que se expresen con voces totalmente diferentes. Por otra parte, si los vampiros son reales (y también tenemos por ahí a un hombre lobo) ¿por qué Grendel no va a ser literalmente una entidad demoníaca que está viva y que actúa en el plano real? Esa confusa realidad tan sólo acentúa y pone de relieve toda la neurótica atmósfera que se puede respirar en la historia.
Pero no estoy de acuerdo con la percepción de que Brian es uno de los anfitriones más débiles de toda la experiencia-Grendel. Como he dicho antes, es el único capaz de resistir el impulso de convertirse en Grendel. Ciertamente no es un luchador malencarado a la altura de Hunter y Christine. E incluso estudia Tai Chi, que es una disciplina marcial mucho menos agresiva que el kendo de Chris y que le haría cosquillas a cualquier estilo de combate del que hacía gala Hunter. Al final, la claridad y fortaleza de Brian es lo que facilita que se imponga al diabólico legado que ya había consumido a dos personas anteriormente y que, claro, superficialmente parecían ser mucho más poderosas que Grendel.
NRAMA: De acuerdo, aunque al final también termine muriendo como el resto de los Grendels, pero este personaje no lo hace poseído por la entidad…
MW: Claro.
NRAMA: Esta era la primera vez que mostrabas a Grendel como entidad real en términos absolutos. ¿Qué te llevó a hacerlo, más allá del hecho de que de esa forma la gente por fin se daba cuenta de que el concepto era algo más que, digamos, unos personajes que se ponían su camiseta del Che y actuaban igual que el Che?
MW: ¿Qué? ¿Te refieres a que hasta ese momento la serie se parecía a la Legión de Super-Héroes o algo así?
NRAMA: [Risas.] Bueno, no tan parecida, pero en “Devil by the Deed” y Legacy flirteabas con una idea parecida. Si embargo, en la historia de Brian cogiste a Grendel y de alguna forma lo relegaste al banquillo. Por fin aceptábamos la idea de que había una entidad viviente atacando a Brian, era la primera vez que la veíamos actuando como tal, en lugar de solo ver cómo hacía uso de su huésped para actuar.
MW: Como ya he comentado, en la serie nunca quise que aparecieran ese tipo de obviedades. Si te fijas en los siguientes números, definir a Grendel como una entidad viviente es algo que se puede ver que no me sentó tan bien. En realidad, “The Incubation Years” estaban narrados por Grendel, pero después, la descripción de los hechos volvía a estar narrada desde la indefinición. Y como he dicho antes, intenté eludir un poco ese concepto incluso en la saga de “The Devil Inside”. Antes me has preguntado que por qué elegir a un anfitrión tan poco competente como Brian después de tener a un par de patea-culos como avatares. Bueno, ¿quién es el que dice que Grendel tenga alguna opción en cuanto a quién posee? De hecho, ¿se podría asegurar que en realidad no fue Brian el que finalmente le eligió a él?
NRAMA: Vale, un punto para ti. Probablemente a las personas que quizá cogieron el atajo que no debían hasta llegar a esta importante obra deberíamos dejarlas apuntado que esa cosa era “Grendel”, no el malévolo espíritu de Hunter Rose, ¿tengo razón?
MW: Claro, si estamos hablando de una forma literal, ese no era el espíritu de Hunter Rose. Hunter Rose está muerto. Si realmente existe una fuerza llamada Grendel, eso no significa que Hunter haya vuelto de la tumba. De hecho, siglos después, durante el cénit de la saga Grendel, Grendel Prime iniciará una búsqueda infructuosa de lo que él piensa que es el alma de Hunter Rose. Pero terminará fracasando.
NRAMA: Como creador, ¿fuiste capaz de escribir la historia sin "convertirte en creyente"? Leerla es una experiencia bastante dura, pero parece como si escribirla pudiese ser igual de jodido para cualquiera...
MW: Antes también lo hemos comentado un poco. Todo lo que he escrito tiene un toque autobiográfico. Tampoco es que me encontrase solo y deprimido en mi hogar cuando estaba escribiendo esa parte de la historia, pero seguro que he pasado por algunos períodos parecidos en mi vida. Cuando abandoné la escuela de arte para empezar una carrera como dibujante de cómics, seguía viéndome con muchos de mis colegas de las clases. Y bueno, la diferencia era que ellos seguían yendo a la escuela y continuaban interactuando socialmente, mientras que yo estaba atrapado en mi apartamento, completamente solo durante todo el día. Era una existencia bastante desoladora y empecé a salir de marcha, a jugar obsesivamente con máquinas de video-juegos y al cine, para no tener que estar en el mismo molesto y restringido espacio un día tras otro. Fue una época bastante patética de mi vida y afortunadamente pude salir de ella sano y bien. Principalmente porque tampoco estaba completamente solo, porque tenía amigos. Solíamos irnos por la noche de juerga y creo que eso me sentó bastante bien. Pero lo que he escrito hasta ahora siempre ha tenido la función de purgar algunas partes de mi vida que me podrían haber consumido o hundido. Sin duda creo que Grendel es un relato oscuro y sombrío que está plagado de personajes jodidos que demuestran tener una cínica opinión sobre la muerte.
Pero ya ves cómo soy... y creo que la mayoría de la gente que me conoce también estará de acuerdo... en la vida real no estoy tan jodido. Soy alguien bastante optimista y una persona muy agradable.
NRAMA: Bueno, la forma en que parecías reírte en la serie con algunos de los ataques más violentos de Hunter era desagradable en el mejor de los...
MW: [Risas.] Si, así es, pero por lo general llevo una vida bastante equilibrada y creo que eso es posible gracias a que tengo una amplia variedad de salidas creativas que me permiten explorar diferentes modos de pensar, por lo que finalmente puedo elegir el que me resulta más beneficioso.
NRAMA: Cuando estábamos hablando sobre Chris el otro día, estuvimos comentando algunos aspectos “específicos” de ese momento concreto en el que ella se rendía y aceptaba a Grendel, aunque quizá podría haberse llegado a salvar de alguna manera, pero en el caso de Brian… ¿ crees que realmente no había nada a lo que éste se hubiese podido aferrar?
MW: En el mismo momento en el que empezaba a oponer resistencia ya no tenía ninguna oportunidad. Y por eso acababa muriendo. La muerte de Hunter fue el resultado de haber perdido el auto-control. La de Christine también, aunque de una forma diferente. En el caso de Brian fue por asumir el control, por resistirse a su demonio interior.
NRAMA: Hay un momento en el que Brian tiene una revelación y comprende que hay algo “dentro” de su cabeza que está escribiendo lo opuesto a lo que él ha estado registrando en el diario... ¿por qué los lectores no podíamos verlo? Hasta el momento habíamos podido leer algunas de las entradas de los Grendels en el diario, pero los textos de Brian no se veían demasiado. ¿Fue uno de esos casos en los que lo que “se figura” el lector es cien veces peor que lo que Bernie y tú podrías haber puesto en el diario?
MW: Bueno, no sé… se suponía que en realidad no eran transcripciones directas en “idioma Grendel”. Se supone que sólo se refieren vagamente a lo que el Brian racional ha dejado por escrito. A menudo, los desvaríos de un loco no están relacionados con lo que está ocurriendo a su alrededor. Y por supuesto, eso hace que todavía sean más aterradores.
NRAMA: Cuando Brian dejaba la máscara... parecía que era porque ya no la iba a necesitar más, ¿no crees? Por otro lado, ¿tenía ya Wiggins todo lo que necesitaba en ese momento? Se le puede ver espiando a Brian con la máscara puesta encima, ¿no es así?
MW: Hmm… me parece una interpretación muy interesante. Supongo que te refieres a la forma en la que los ojos de la máscara parecían estar parpadeando en algunas ocasiones (concretamente en la escena final de la saga...)
NRAMA: Claro.
MW: No, se supone que lo que está ocurriendo en ese momento es que la paranoia de Brian ha potenciado su lado más positivo. En realidad Wiggins no necesita espiar a nadie después de haber interrogado a los otros personajes. Recuerda que tiene un detector de mentiras insertado en su ojo protésico. Sabe muy bien cuando le está mintiendo Brian y confía que, más tarde o más temprano, terminará cazándolo. Porque la verdad es que Brian es un chico bastante honesto. Le repugna muchísimo todo este rollo tan misterioso e intrigante. De hecho, ese es el motivo de que funcionen tan bien los detectores de mentiras. Todo el mundo hemos mentido alguna vez, aunque nadie lo hace continuamente. Por lo general, la gente suele vivir su vida de una forma bastante honesta y cuando rompen esa rutina se producen esas leves variaciones en su pulso que hacen que te terminen atrapando con el detector. Sólo un auténtico sociópata sería capaz de pasar la prueba con éxito. Y Hunter era muuuuy bueno haciéndolo.
NRAMA: Cuando Brian acepta por fin la posesión de Grendel, parece significar que sabe que va a morir, pero al mismo tiempo también puede significar algo diferente para el propio Grendel ¿verdad? Tal y como has dicho, puede que vaya a vivir para siempre... casi es como si estuviese viendo a Brian como una forma de catapultarse hacia delante…
MW: Claro, que haya habido otras personas que también se han convertido en víctimas de Grendel significa que esta entidad no sólo es una anomalía abstracta. Se convierte en algo habitual, una experiencia humana compartida que seguirá creciendo exponencialmente a medida que van pasando los años. “Grendel” sabía que Brian estaba destinado a ser su último avatar literal durante algún tiempo, una temporada que terminaría extendiéndose durante algunos siglos. Pero de alguna forma ese mundo es capaz de sentir que la influencia de Grendel ha empezado a aumentar de una forma gradual.
Como ya he comentado antes, me parecía que si iba a seguir haciendo la serie con la propuesta de “siguiente persona poseída de la fila” terminaría por agotar el concepto, así que tomé la decisión de romper del todo con esa tendencia y empujar las cosas hasta un punto en el que nadie, ni siquiera yo mismo, se esperaba. Y todo se basó en un comentario que Bernie me hizo un día que estábamos dando un paseo por la calle. Cuando Bernie estaba trabajando en la serie, el concepto de Grendel era el de una especie de fuerza viviente, por lo que me preguntó si Grendel sería capaz alguna vez de poseer a toda una multitud. Y eso me dio algo que pensar…
Que lo jodan a todo, me dije. ¡Haré que Grendel conquiste todo el condenado mundo!
NRAMA: De nuevo saltamos hacia delante…
MW: Lo siento.
NRAMA: Hablemos sobre la caída de Brian y el triunfo de Wiggins. Estoy seguro de que te llegarían cartas por haber tomado esas decisiones, ¿cuál fue la reacción de los lectores? Supongo que algunas de las cartas comenzarían con: “Hola, gilipollas”…
MW: Claro, ciertamente supuso todo un shock para mucha gente, y también para el propio Bernie. Recuerdo que me llamó después de leer el guión del último número y me contó lo afectado que se sentía por la historia. Después de haber colaborado una temporada juntos, él sentía que había conectado con el personaje y su pérdida le entristeció muchísimo. Me dijo que sentía como una especie de dolor en el pecho, como si se hubiese disparado a sí mismo o algo así. Me gustaría añadir una última pequeña alabanza sobre el trabajo que Bernie realizó en ese arco argumental y que realmente me parece propio de una estrella: la sutil y poderosa escena final de la muerte de Brian solo fue posible gracias a su magistral sentido visual de la narrativa. Me parece que en el guión original había indicado algo en plan: “Sin avisar el Capitán Wiggins saca su arma, se vuelve y dispara hacia Brian – y entonces él muere.” Bernie cogió esa frase y la convirtió en una escena muy poderosa, un momento único que quedaba suspendido durante varias páginas en el que el suspense es tan denso que el lector siente que significa mucho más que una vida pendiendo de un hilo. Cuando finalmente se producía el tiro fatal, era como si la eternidad se hubiese hecho añicos. Me pareció brillante.
NRAMA: Al leer esa historia todos cogimos la idea de que Grendel es una entidad, y que por lo tanto había poseído -a falta de un término mejor- a Hunter, a Chris y a Brian. ¿Por qué Hunter había sido capaz de retomar el “control” en mayor medida que los otros, que habían sido consumidos por la entidad? ¿Quizá era porque Hunter le daba a la entidad todo lo que ella estaba buscando?
MW: Oh, por supuesto... Hunter era todo lo que una fuerza demoníaca se podría esperar: capacidad absoluta sin ningún remordimiento. Qué deliciosa combinación...
HISTORIAS DEL DIABLO
Y de nuevo Matt Wagner cambió la jugada en la historia de los números 16 al 20 de la serie de Grendel. En ellos dejábamos atrás el trágico encuentro entre Brian Li Sung y el Diablo preparados para cualquier cosa... excepto para la historia de un misterioso crimen ambientada en los días de Hunter Rose, ¡y que además estaba narrada por Wiggins!?
Sí, tenía tanto sentido como cualquiera de las cosas que habían aparecido en la serie hasta la fecha, así que ¿por qué no incluir algo por el estilo?, ¿no creéis?
Estas dos historias se titulaban “Devil Tracks” y “Devil Eyes” y cada una de ellas constaba de dos números cada una. Nada sorprendente en una serie de estas características, las dos historias eran salvajemente experimentales.
Newsarama: En el número 16 dejabas de avanzar o de presentar hechos del presente y hacías que Wiggins narrase un par de historias del pasado... ¿A qué se debía ese cambio en la línea progresiva de personajes-poseídos-por-Grendel que era la tónica de la serie hasta el momento?
Matt Wagner: Bueno, hasta cierto punto ya lo he explicado antes. Otro factor importante fue que en ese momento estaba empezando a aburrirme.
NRAMA: ¿Crees que las cosas se estaban desarrollando de forma que los lectores podían prever lo que iba a pasar?
MW: Claro. Me había dado cuenta de que esa especie de progresión de Grendels estaba durando tanto que, inevitablemente, podía convertirse en algo banal y que de nuevo, lo único que hacía era ir en contra de todo lo que ya había logrado antes en la serie. Además, seamos sinceros, Hunter parecía un personaje demasiado importante como para que permaneciese muerto de verdad (quiero decir de forma metafórica... tampoco es que fuese a renacer ni que fuesen a aparecer zombies Grendel en la serie). Por eso sigo utilizando al personaje en la actualidad, ¿no es cierto?
NRAMA: Sí, la verdad es que te tiene bastante atrapado. Pero ¿por qué utilizar a Wiggins? ¿Y por qué en ese punto de su vida? ¿Qué es lo que hace que sea un personaje tan convincente?
MW: Wiggins mostraba una indiferencia tan arrogante que supuse que sería un narrador fascinante. Quiero decir, si te fijas bien en él te darás cuenta de que nunca escribe las historias que conoce de Grendel, sino que se imagina las historias que no conoce sobre Grendel. De hecho, aparte de saber fehacientemente que Tommy Nuncio era una rata que Grendel había utilizado para atrapar a Argent, no sabíamos si el resto de la historia era cierta o no. ¿Podría ser que se hubiese estado inventando toda esta mierda según la estaba contando? Es algo que sin duda y hasta cierto punto encajaría con todo lo que sabemos del personaje, ¿no crees?
NRAMA: Claro, tienes razón. Pero al escoger a Wiggins como protagonista de esa parte de la historia, ¿tenías pensado rellenar cualquier otro detalle de su vida? ¿Tenías planeado algún otro personaje parecido, algún otro avatar que Grendel fuese a utilizar para hacer avanzar la saga, ganar dinero, etcetéra?
MW: Por supuesto, Wiggins no podía ser el último. La verdad es que tampoco había planeado mucho su vida, aparte de saber que había perdido el ojo mientras estaba patrullando al principio de su carrera. Me imaginaba que sería algo que él dejaría pasar o que incluso intentaría ocultar; puede que solo se hubiese hecho un pequeño arañazo y que lo hubiese dejado estar hasta que por fin pudiese darse el gustazo de implantarse el detector de mentiras protésico que lleva encima, algo que hizo posible que finalmente consiguiera el rango de detective.
NRAMA: Podemos suponer que lo único que sabe sobre Hunter Rose son mentiras y rumores, ¿no es cierto?
MW: Claro, puede que en aquella época fuese demasiado joven. Por lo que parece no era mucho mayor que Christine… como mucho tenía unos diez años más que ella. Lo que significa que cuando Hunter todavía estaba vivo, Wiggins era un crío. Y si te acuerdas, el libro de Christine se había convertido en un best-seller, por lo que en realidad era la única fuente de lo que se sabía de Hunter a nivel mundial, así que supongo que él también tuvo acceso a los detalles de la vida de Hunter a través de ese libro. Además, como he dicho antes, creo que tampoco hay forma de saber qué cantidad de las historias escritas sobre Grendel por Wiggins son “inventadas” y cuáles pueden ser ciertas.
NRAMA: Wiggins era muy bueno, pero obviamente no era como Argent. Antes de su caída, ¿crees que pudo llegar a concebir en algún momento que el concepto de Grendel tan solo consistía en tres dementes que se habían disfrazado?
MW: No, creo que sabía bien que era una especie de progresión inevitable. Y en la época que estuvo escribiendo esas historias él creía que ya nunca más habría otra sucesión. Después de todo habían pasado varios años desde que se había ocupado de Brian. El personaje de Grendel todavía no había sido visto en ningún sitio desde ese momento. Obviamente no tenía ni idea del final que le depararía el destino.
NRAMA: ¿Qué te hizo querer rememorar la época de Hunter/ Grendel hasta el punto de que la revisitaras un par de veces más?
MW: De nuevo, me parece que Hunter es un personaje que para mí funciona como un gigantesco imán. Tan sólo sigue y sigue atrayéndome. Por supuesto, en parte mi motivación era puramente comercial. Después de todo es una de las versiones más populares de Grendel y no he contado mucho de su historia, y como soy bastante capaz de seguir imaginándome diferentes formas de aprovechar sus aventuras, ¿por qué no debería hacerlo? También creo que tiene una personalidad más-grande-que-la-vida que no solo ha sido capaz de dominar su mundo, ni el que estaba por llegar, sino la realidad contemporánea de los propios cómics.
NRAMA: ¿No tuviste recelos antes de meterte en la cabeza de ese personaje? ¿O quizá preferías acercarte a él en esas dos historias antes de empezar a afrontar todo un “mundo de Grendel”?
MW: Bueno, seguía sintiéndome intimidado por la absoluta superioridad de Hunter, pero también quería mostrar cómo sus acciones habían afectado a su Mundo. Supuse que si hacía que protagonizase ostensibles dramas criminales al estilo tradicional escritos mucho después de su muerte, el lector experimentaría exáctamente cómo podría haberse extendido su influencia por todo ese Mundo. Su nombre y personalidad arrastrarían una oscura resonancia que estaría bien presente tanto para los que se habían leído las historias de Wiggins como para los millones de lectores que se habían comprado el libro de Chris. Además, también quería ver si era capaz de narrar una historia del personaje que fuese irresistible sin mostrarlo demasiado durante toda la narración. A pesar de ello, creo que la malévola presencia de Hunter se podía sentir bastante ásperamente en ambas narraciones.
NRAMA: Además del irresistible tirón que posee la Era de Hunter, ¿qué otros elementos te impulsaron para que quisieras dibujar esas historias?
MW: En primer lugar supuse que ya había pasado bastante tiempo desde que había finalizado Mage, y quería poner mis sucias manos sobre alguna otra cosa. Quería dibujar, y quería dibujar algo que no recordase ni a Mage ni a “Devil by the Deed”. También había empezado a engancharme a la narrativa policíaca y criminal y quería intentar hacer algo con elementos más clásicos y noir. Para colmar ambos deseos, la primera historia tomaba la forma de un proceso judicial. La segunda era más parecida a un tirante thriller psicológico. En ambos casos intenté hacer que el dibujo reflejase los tonos narrativos apropiados para la historia.
NRAMA: Háblanos del estilo que empleaste, ¿crees que supuso otro cambio? Recuerdo que en aquella época dicho cambio suscitó un montón de comentarios, e incluso actualmente permanece como uno de los cómics más densos de la era moderna de los cómics...
MW: La primera historia trataba sobre un proceso judicial, y como tal, quería que el dibujo recordase a unos bloques de construcción que el protagonista debía ir reensamblando lentamente. Los dibujos son densos y a veces repetitivos porque imaginé lo compleja y perseverante que debía ser una investigación criminal. La segunda historia trataba más sobre el lento desmoronamiento mental de un individuo, y en ella tan sólo utilicé largas viñetas verticales que marcaban el ritmo a través de todas y cada una de las páginas. Tenía la intención de conseguir el efecto del inevitable discurrir de las agujas de un reloj. Esas viñetas verticales casi eran como cuchilladas escénicas que iban apareciendo una tras otra frente al lector, haciendo que éste sintiese como si estuviese viendo pasar el paisaje rápidamente desde la ventanilla de un tren en movimiento. Según transcurría el tiempo, la velocidad se incrementaba hasta el punto de que el choque parecía inevitable. De todas formas, eso es lo que pretendía hacer. En la segunda historia también incluí las notas recogidas por Wiggins, que podían leerse puestas encima de cada viñeta y estaban rotuladas con un estilo desmañado. Tenía la intención de evocar el ominoso sabor del demente diario de Brian y avisar de cómo, al escribir esas historias, el propio Wiggins también había estado dispuesto a impregnarse de la oscura influencia de Grendel.
NRAMA: ¿Crees que esas historias le inspiraron a algún otro autor? Recuerdo que en aquel entonces me impresionaron mucho, y creo que hoy en día siguen suponiendo un buen ejemplo de una historia que está formada por varias capas, algo que no suele verse tan a menudo...
MW: La narración fue completamente idea mía. Siempre he tenido una habilidad especial para contar historias y desde el principio decidí que quería asumir este reto. Por eso llevé a cabo las innovadoras estructuras narrativas que se pueden observar en estos cómics, y en realidad en el resto de la serie de Grendel, porque tenía la intención de estirar los límites todo lo que me resultara posible. Me habían enseñado que el Arte era un viaje de auto-descubrimiento y que sólo cuando te aventuras en áreas en las que tienes que ser audaz e innovador podrás seguir avanzando y creciendo.
Si hablamos específicamente sobre el estilo de dibujo, en esas historias tuve dos influencias principales. La más obvia en el segundo relato es Harvey Kurtzman. Hacía bastante poco que me había enamorado de su estilo suelto, despreocupado y expresivo y pensaba que tenía mucho más mérito artístico que incluso el que él mismo se había concedido alguna vez. Había leído en alguna parte que a veces Harvey se lamentaba de lo poco pulido que era su dibujo. Pero sin embargo yo creía que su estilo era muy evocador y que estaba repleto de energía. Casi parecía como si su mano no pudiese mantener la velocidad a la que trabajaba su mente. Y de nuevo, en esa segunda mitad estaba intentando emular los thrillers psicológicos que tanto predominaron durante los cincuenta, y el trazo de Harvey tenía esa libertad estructural tan popular a la hora de diseñar como la tenía el dibujo de aquella época. Por lo tanto pensé que su estilo artístico sería una influencia adecuada para esa historia.
La otra influencia no es algo con lo que la audiencia americana esté demasiado familiarizada. Cuando hice esos números estaba viviendo en Montreal, y gracias a las librerías francesas tuve la oportunidad de conseguir muchos álbumes europeos. Hay un dibujante de cómic francés que es muy conocido por su trabajo en el género erótico que se llama Alex Varenne. Dicho artista entinta con un trazo espeso y grueso, y a menudo también utiliza tramas grisáceas en las viñetas. Estudié cómo funcionaba su trabajo una vez impreso, la forma en que parecía estar completamente cómodo con su propio enfoque tan suelto. Tenía el mismo tipo de estilo “nada puntilloso” que me había resultado tan atractivo en el trabajo de Harvey.
En esa época quería intentar producir Arte de una forma más audaz y decisiva. Existe un viejo adagio que dice que los artistas samuráis del antiguo Japón solían intentar pintar como si estuviesen combatiendo con la espada, y que cada trazo de pincel debía ser tan meditado y mortal como un corte con el filo. Después de la apariencia tan pulida de Mage y de “Devil by the Deed” estaba buscando romper cómo se percibía mi propio dibujo y quería encontrar un nuevo enfoque. Por aquel entonces seguía llenando un cuaderno de bocetos con dibujos al natural, y me obligué a hacerlo dibujando las cosas con un rotulador Sharpie, sin abocetado previo. Recuerdo que en aquel momento pensé (y hasta cierto punto aún lo sigo haciendo) que esa era mi respuesta al tipo de fan que se queda un rato observando tu trabajo y de repente te dice, “¿Cuánto tiempo te ha llevado hacer estas páginas?” Por supuesto, la respuesta que él quiere escuchar es un cansado pero satisfechamente brusco: “¡Diez años de mi vida!” Siempre quise ser capaz de decir: “He tardado diez minutos.” ¡Me habría encantado poder decir algo parecido!
De hecho, aquella primera historia la terminé en una cantidad de tiempo normal por culpa de la gran cantidad de viñetas por página que había, pero cuando empecé a utilizar las influencias de Kurtzman las cosas se aceleraron muchísimo. Cada número que dibujaba de esa forma me llevaba poco más de una semana, y eso si sumamos el dibujo y el entintado.
NRAMA: Y en cuanto a Grendel, supongo que lo dejaste descansar de forma deliberada… aunque todos sabíamos que no iba a poder estar encerrado para siempre, ya que es algo más grande que la vida...
MW: Sip. Grendel es el gorila de 800 kilos de ambas historias. El oscuro Dios renacido desde el infra-mundo cuya tétrica presencia tan sólo sirve para deshacer y destruir las vidas de todos aquellos con los que se encuentra en su camino.
NRAMA: Tal y como mostraban los complementos de Mage y algunas otras obras tuyas, tu estilo artístico estaba cambiando en esa época, pero cuando hacía aparición Hunter el estilo era estrictamente parecido al que habías utilizado en “Devil by the Deed”. ¿Por qué lo hiciste de esa forma?
MW: Creo que fue por puro instinto y también para intentar enganchar a la gente volviendo a un estilo narrativo que ya estaba establecido y era conocido. La verdad es que no recuerdo que tomase la decisión consciente de hacer esas escenas con un estilo que tuviese reminiscencias del de “Devil by the Deed”. Supongo que me parecía lógico que las apariciones de Grendel tuviesen que atenerse a los diferentes estilos que se habían usado en cada etapa. Pero por alguna razón, cuando empecé a dibujarlo así me salió de una forma natural. Supongo que hice el esfuerzo inconsciente de separar a Grendel de las pequeños historias sin importancia que transcurren en su mundo. Sin embargo, su paso audaz y sangriento va dejando aplastados varios insectos casi sin darse cuenta.
NRAMA: El tópico sobre la muerte de Hunter que se puede encontrar en la historia de complemento de una de las escenas esenciales de “Devil by the Deed” me pareció bastante discutible. ¿Por qué ideaste ese tipo de historia? ¿Crees que era el verdadero núcleo de la saga y que todo siguió creciendo a partir de entonces, o fue algo que comenzaste de una forma más lineal y que luego se fue desarrollando a medida que estabas escribiendo el guión, como si hubiese sido una feliz coincidencia? Me refiero al momento en el que Argent se estrellaba contra la azotea (y encima en esas escenas podíamos ver a Tommy).
MW: Bueno, de nuevo creo que quería insertar algún elemento nuevo en las aventuras de Hunter que ya habían sido publicadas. Obviamente, cuando te lees “Devil by the Deed” te das cuenta de que existen todo un sinfín de aventuras que -por así decirlo- están ocurriendo entre viñetas y que nunca se han publicado. Desde entonces he vuelto a visitar el mundo de Hunter y he retratado muchas de esas historias en las series de “Black, White & Red”. De hecho, actualmente estoy ocupado con otra historia que ejemplifica bien todo lo que estoy contando, una nueva serie de ocho números que se estrenará en otoño titulada “Behold the Devil”. Pero en realidad estas historias no implican tanto atribuirles a los personajes ciertas novedosas resonancias como la necesidad de encontrar una piedra de toque con la que pueda hacer referencia a lo que he narrado anteriormente. Tommy Nuncio es uno de los únicos personajes secundarios a los que se mencionaba por su nombre en “Devil by the Deed”. En cuanto Grendel terminaba con él, el personaje acababa sus días en el interior del maletero de un coche como si fuese un Kleenex usado. Me pareció que sería una buena idea llenar ese vacío y mostrar cómo había llegado hasta allí. Lo más trágico de todo es que su muerte fue algo que Grendel casi decidía en el último momento. Era una intentona de ahuyentar el tenso vapor que le estaba quemando por culpa de la lenta decadencia que había empezado a sufrir su relación con Stacy.
NRAMA: Ambas historias empiezan con chicos escuchando cosas en los baños... ¿había algún motivo oculto? ¿Algún simbolismo que se te pasara por la cabeza?
MW: ¡Ja! ¡Así que lo pillaste! ¿verdad? Bueno, el único simbolismo es uno que ya está muy trillado y que también resulta bastante obvio. Lo hice para poder anticiparme al hecho de que las vidas de esos dos tíos estaban a punto de irse directas por el sumidero. Hey, ¡no todo tiene que ser serio y profundo!
(Continuará)
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