miércoles, 24 de agosto de 2011

ENTREVISTA A MARV WOLFMAN 1 (DE 4)

Entrevista a Marv Wolfman 1 (de 4). Entrevista de Dwight R. Decker aparecida originalmente en los números 79 y 80 de The Comics Journal (1982/83). Traducida por Frog2000. 

---------------------------------------------------

Wolfman comenzó a trabajar en DC como escritor “freelance” guionizando Batman, Teen Titans, Jerry Lewis, Johnny Double, Vigilante, Supergirl y John Carter antes de convertirse en editor de contenidos para la Warren. En 1973 se convirtió en editor asociado de la editorial Marvel y pronto fue ascendido para ocupar el cargo de editor de la línea de revistas “para adultos” de la empresa. En 1975 se movió de nuevo en la jerarquía de la editorial, siendo nombrado editor principal de Marvel, una posición en la que permaneció menos de un año debido a su necesidad de disponer de más tiempo libre para escribir. Durante su estancia en Marvel, Wolfman guionizó Capitán Marvel, Skull the Slayer, Killraven, Capitán América, Namor, el Hombre Cosa, Spider-Man, los Cuatro Fantásticos, Spider-Woman y Nova. Su trabajo más aclamado y del que está más orgulloso fue La Tumba de Drácula, dibujada por Gene Colan y Tom Palmer. Wolfman también fue el impulsor de la línea de novelas protagonizadas por superhéroes de Marvel, escribiendo junto a Len Wein la primera de Spider-Man y la de los Cuatro Fantásticos.

En 1979 Wolfman se vio envuelto en una amarga disputa con el editor principal de la editorial, Jim Shooter, ya que este no le dejó continuar escribiendo Drácula, título del que Wolfman había guionizado 63 números hasta ese momento. Dicha confrontación se resolvió cuando el propio Wolfman pidió la cuenta, se marchó y firmó un contrato con DC Comics.

A su regreso a DC, Wolfman escribió Green Lantern, Superman, Brave & Bold, Superman Family y DC Presents. Además, junto a George Pérez empezó a reformular a Los Nuevos Titanes con una nueva serie. Y cuando Gene Colan se marchó de Marvel debido a diferencias artísticas con el editor en jefe Shooter, Wolfman y su antiguo colaborador en Drácula se reunieron de nuevo y crearon Night Force. Sin embargo, fueron los Nuevos Titanes la serie que terminaría despegando, convirtiéndose en el título de DC mejor vendido en el mercado directo, y ese es el tema que corona esta segunda entrevista que le hemos hecho a Marv Wolfman en el Journal.

Esta entrevista fue realizada por Dwight R. Decker en enero de 1982, revisada por Marv Wolfman, editada por Gary Groth y transcrita pacientemente por Tom Mason.

-------------------------------------------------------


DECKER: Este último par de días me he leído todos los números de los Jóvenes Titanes de una o dos sentadas, y una de las cosas que más me ha llamado la atención es que me ha parecido que para hacerlos, aparentemente has revisado ligeramente la película de Star Wars.

WOLFMAN: Bueno, ¿crees que he copiado algo de esa película?

DECKER: En el primer número Kory se escapa del planeta en el que está cautiva, y esa escena me ha recordado bastante a la de la película en la que escapaban los robots, y también se parecía un poco a la de la Princesa Leia en la Nave Imperial.

WOLFMAN: Si existe algún parecido, me parece que lo he hecho de forma inconsciente. Dudo mucho que sea de forma intencionada. Si recuerdo bien, en Star Wars la protagonista no escapaba sola, sino que la ayudaban a hacerlo. Y en este número en particular, Kory simplemente salta dentro de una nave espacial y escapa, mientras que en la película los robots se metían en una especie de satélite y luego eran proyectados. Así que si existe alguna semejanza, esa bien puede ser la de personajes saltando dentro de naves y huyendo de sus captores. Es lo único que se me ocurre.

DECKER: Otra escena que se parecía bastante era la del regreso de Raven, cuando lograba hacer explotar un planeta con un cañón y a continuación rompía la promesa de dejar a la Tierra en paz. Me sonaba mucho a aquella secuencia de Alderaan que aparecía en la película de Star Wars.

WOLFMAN: Ya sabes, tan sólo existe una cantidad limitada de trucos de los que puedes hacer uso, pero estoy seguro de que cuando estaba escribiendo esa escena en concreto no tenía la película de Star Wars en mente. Simplemente estaba intentando diseñar la personalidad de un villano propiamente mío, un villano que fuese capaz de mentir constantemente, un villano que fuese la representación del mal. Estoy seguro de que si te pones a revisar toda la historia de los cómics y también de la ciencia ficción y el cine, te podrás encontrar conceptos parecidos por todos lados, y no creo que todos ellos se hayan basado en los que se hicieron en otro medio. Más bien parece que es lo que se te puede ocurrir cuando intentas desarrollar un personaje y tienes intereses parecidos a los de otros autores. L
o que intentamos hacer según vamos avanzando en la serie y nos vamos haciendo con las riendas de los personajes de los Titanes, es insuflarles vida. En los primeros números tuvimos que hacer frente a algunos problemas: mis diálogos, la forma de hablar de cada personaje, creo que no tenían un ritmo adecuado, y tampoco lo tenía su forma de moverse, etcétera. Pero me parece que en el último año, más o menos a partir del número ocho, George y yo hemos tenido la sensación de que sabemos lo que está sucediendo con estos personajes, sabemos cómo van a ser capaces de reaccionar ante las diferentes situaciones que se les presentan, y creo que conocemos bien cómo hacer para que los patrones de expresión de cada uno de ellos no sean similares. En los primeros números pasamos algunos malos ratos. Es un proceso de aprendizaje por el que tienes que pasar. Una de las cosas que más me preocupaba era la dirección que iba a tomar la serie, dónde y cómo se iban a desarrollar estos personajes, así que tenía bien presente que cada personaje debía disponer de su propio contexto.
DECKER: La verdad es que te he hecho esa pregunta porque me ha parecido que en la serie se podían encontrar continuas referencias a... bueno, referencias a otros medios. Como esa escena en la que llamabas a uno de tus personajes: “refugiado de una película de Flash Gordon.” Y también me he fijado en que en una de las páginas de la serie aparecía Changeling comentando que Harrison Ford podría interpretarlo en una película sobre su vida.

WOLFMAN: Creo que en la actualidad la gente siempre está refiriéndose a los medios de comunicación, es algo generalizado. Yo mismo hablo sobre ellos constantemente, y muchos de mis amigos también lo hacen. En la serie nombramos otros medios con el fin de crear cierta ambientación. Suelo ver un show televisivo que se llama Bosom Buddies, y cuando consigues dejar de fijarte solo en su enfoque sobre el travestismo, puede que descubras una serie divertídisima a muchos niveles. En ese programa están haciendo referencias constantemente. Siempre están hablando sobre otros medios, apelando al material de nuestra infancia con el que hemos crecido, y creo que alejarnos de eso sería un grave error. En especial, el que más referencias utiliza de todos es Gar Logan, ya que proviene del mundo de la televisión, así que conoce bien el entorno. Es el más joven y el que más suele relacionarse con el exterior, por lo que utiliza un montón de referencias, mucho más que el resto de personajes. Sin embargo, Wonder Girl no proviene del mismo trasfondo. Y obviamente tampoco Raven y Starfire. Diría que el primero que utiliza todas esas referencias es Changeling, y posiblemente también Kid Flash, aunque no use tantas como el otro personaje.
DECKER: Me parece 
que te preocupa más la caracterización que los personajes sean monos o vistan a la última. 

WOLFMAN: En la mini-saga protagonizada por
Changeling podíamos ver todo ese “background” relacionado con la televisión, además de darnos cuenta de por qué piensa como lo hace. Este es el motivo por el que suele expresarse con tantas referencias. Si dependiese de mí, haría que todos estos personajes hablasen de la misma forma. Pero la serie no es solo mía. 

DECKER: En Marvel llevan escribiendo de una forma referencial parecida desde hace varios años.

WOLFMAN: Creo que más bien es una cuestión de que los autores solemos hacer continuas referencias al período concreto en el que estamos viviendo. Nunca se me ocurriría decir algo en plan: “en Marvel se trabaja de esta forma y en DC de esta otra”. Creo que más bien es una cuestión de que el guionista está en mayor sintonía con la época en la que vive y por eso utiliza esos conocimientos como un factor con el que reforzar sus historias.

DECKER: ¿Existe el peligro de que su utilización se termine convirtiendo en un atajo para desarrollar a un personaje?

WOLFMAN: No, porque cualquiera se puede dar cuenta de que la gente real también suele hacer referencias a los medios, tan solo como un elemento más de su idiosincrasia. Si Gar Logan sólo se expresara de esa forma, y si todos los personajes hablaran exteriorizando sus pensamientos, entonces sí que se nos podría acusar de tener un atajo entre manos. Me parece que empecé a comprender a estos personajes a la altura del número 17. Fue en ese número cuando tuve la sensación de que en la serie había como una especie de textura en un segundo plano, como si mientras la estabas leyendo empezasen a surgir ciertas cosas que antes no se podían encontrar en sus páginas. Por ejemplo, me refiero a la forma en la que los personajes reaccionan ante situaciones de diversa índole: política, religión y algunas otras cosas que nadie pensaba que llegarían a aparecer en un cómic. Creo que durante mucho tiempo, si es que la serie sigue editándose y vendiéndose, seguiremos aprendiendo mucho más sobre todos estos personajes. Si intentase contar todo su "background" en un solo número cometería un grave error. La gente no lo descubre todo sobre cualquiera de sus amigos la primera vez que los conoce. Tienes que ir conociendo a los personajes, aprender quiénes son y crecer con ellos. Y ahora mismo me encuentro en pleno período de aprendizaje. Creo que según siga saliendo un número tras otro, terminaremos por llegar al punto fuerte de la colección. Empiezo a sentir que ahora entiendo mejor algunas pequeñas cosas que han hecho posible que los personajes estén funcionando tan bien. Eso es lo que más me interesa.
DECKER: Volvamos un poco hacia atrás. ¿Podrías contarnos brevemente cómo fue la génesis de la serie? Esta colección había sufrido dos cancelaciones con anterioridad. ¿Por qué decidísteis que lo queríais volver a intentar?

WOLFMAN: Bueno, yo me iba a marchar de Marvel y era algo que tenía bastante claro. Así que me puse a charlar con Len sobre algunas colecciones de DC. Solía tener la costumbre (incluso cuando estaba en Marvel) de crear las series que guionizaba en lugar de hacerme cargo de las de otros autores. Como guionista “freelance” siempre he tenido reparos a la hora de hacerme con la serie de otro. En Marvel ideé Skull, Nova, y muchos otros títulos. Por otro lado, cuando Len Wein se marchó me hice con sus Cuatro Fantásticos y su Spider-Man, pero lo que me apetecía era crear mis propias series, aunque sabía que no tenía demasiadas opciones. Quería escribir la serie de los Jóvenes Titanes, por encima de cualquier otra. Len y yo empezamos a considerar varios enfoques para los personajes que yo ya había estado sopesando en el pasado. Y a partir de ahí intentamos venderle la idea a Jenette. La verdad es que no la emocionó demasiado, porque ella odiaba la anterior serie de los Jóvenes Titanes. Pero en cuanto hablé con George Pérez empezó a interesarle un montón. George había llegado después de Len, y yo ya había tomado la determinación de que quería hacer esta serie. Conocía a George porque le había visto en las oficinas de Marvel, y le dije que me iba a marchar a DC, por lo que me contestó: “No lo olvides, soy un profesional independiente.” Así que rápidamente le pregunté si le gustaban los Jóvenes Titanes y me dijo que le encantaban.
Habíamos funcionado bastante bien en aquella historia que hicimos juntos para Marvel, aunque era un Anual para los Cuatro Fantásticos. He de decir que aunque no habíamos trabajado mucho más en equipo, me gustaba mucho el estilo de George. Además, vivíamos cerca uno del otro, lo que estaba muy bien. Entonces acudimos a DC con la idea de que George podría ser el dibujante de la serie y yo el guionista, y Jenette nos dijo: “De acuerdo, pero enseñadme lo que queréis hacer”, porque ella odiaba el concepto de los Titanes. Le mostramos lo que íbamos a hacer y en cuanto le echó un vistazo se quedó prendada. A mí me gustaba tanto que incluso estaba dispuesto a perder una considerable cantidad de dinero haciendo una “preview”. Sin los extras adicionales, eso supone más o menos la mitad del coste de un cómic. Y además era la primera vez que se hacía algo parecido. Así que básicamente esa fue la génesis de la serie. George creó los diseños a partir de algunos consejos que le dimos, pero casi todo salió de su talento, y creo que hizo un trabajo magnífico. En la primera columna de correo mencioné que no se había hecho ni un solo cambio en la serie. Y es cierto. Porque tanto Len como yo somos artistas frustrados y probablemente hubiésemos llevado a cabo tantos cambios como nos hubiesen dejado hacer, tan sólo para sentir que estábamos añadiendo algo. Pero George se subió al carro desde el principio, y no sólo como dibujante sino como mucho más, como creador, incluso me ha estado ayudando con algunos elementos del guión y de las caracterizaciones de los personajes.
 Tiene un talento tremendo y me encanta trabajar con él. 

DECKER: Disculpa mi necedad, pero ¿se os ocurrió en algún momento que el título podía ser la respuesta de DC a la Patrulla-X?

WOLFMAN: No, en realidad no. Yo quería escribir una serie, pero no quería hacer ninguna relacionada con el terror excepto si la hubiese dibujado Gene Colan, y en ese momento no tenía ni idea de que Gene se iba a marchar de Marvel para venirse con nosotros [a DC]. Tampoco es que estuviese muy interesado en los X-Men, aunque disfrutaba mucho leyendo el título, pero no es el tipo de guión que más me hubiese gustado escribir. En primer lugar, nunca me ha gustado ese tipo de intensidad... Déjame empezar de nuevo. Nunca he sido un gran fan de las series de grupos. Como ya he dicho antes, me gustaban los X-Men, pero nunca me había interesado la forma en la que la serie estaba guionizada, ni tampoco me gustaban los Vengadores ni la Liga de la Justicia. Los Jóvenes Titanes es un grupo que me ha encantado heredar. En realidad era una serie por la que nadie más daba un duro. De no ser porque estaba Robin en ella, ni
 siquiera se podría haber etiquetado como “mainstream”. En el momento en el que yo me hice con ella nadie estaba utilizando a ninguno de los otros personajes, y ciertamente, tampoco a ninguno de los que yo había creado. Y era como si simplemente los hubiesen dejado apartados a un lado. Escogimos una senda que estoy seguro de que si lo hubiese tomado catorce años atrás, cuando también estaba haciendo la serie, habría hecho que me quedase mucho más tiempo en el título. 

La gente habla un montón sobre la similitud que existe entre los Titanes y los X-Men, pero a mí no me lo parece, porque la forma de escribir de Chris y la mía son completamente diferentes. Nuestros intereses son diferentes, nuestra forma de estructurar las cosas es muy diferente. Si eres capaz de detectar una similitud, esa podría ser la que ha apuntado el propio Chris en una de las charlas de un Salón cuando le han preguntado sobre el tema. Dijo que lo único que se asemejaba entre los dos títulos era que nosotros dos habíamos rescatado viejos grupos, les habíamos añadido nuevos personajes y lo habíamos hecho mejor que como se había hecho previamente. Y creo que esa es la única similitud, incluso aunque existe alguna otra superficial, como el parecido entre Cyborg y Coloso, y creo que en lo único en que se parecen es en el metal que los reviste a ambos. Aparte de ese detalle, todo lo demás es diferente. 
DECKER: Bueno, ¿no te parece bastante similar que los dos grupos estén formados por gente joven que vive junta en una elegante mansión?

WOLFMAN: Creo que esa es una de las grandes diferencias entre los dos títulos. En los Titanes todos tienen alter-egos y viven su propia vida. Wally West vive con sus padres. La única que hace vida en la Torre de los Titanes es Raven.

DECKER: Bueno, me parece que en la Torre todos tienen su propio cuarto.

WOLFMAN: Todos tienen su propia habitación, pero sólo para cuando la necesiten. Muchos ni siquiera la han usado todavía. Wally vive en su casa. Dick vive en su casa. Wonder Girl tiene su propio apartamento, que comparte con Starfire. Cyborg tiene su propio espacio para vivir. Y Gar vive en una mansión. Además, cada uno tiene su propia vida. Raven acude al instituto, al igual que Wally. Robin trabaja con Batman y ahora (por fin) ha vuelto a retomar las clases en el colegio. Quería asegurarme de que todos ellos tienen una vida como personas, además de como héroes. Si hay algo que no me gusta de los X-Men, es que no existe contexto más allá de el del propio grupo. Nuestros personajes tienen su propia vida fuera de los Nuevos Titanes y luego se juntan para ejercer como superhéroes.
DECKER: Pero todavía sigue siendo gente joven que…

WOLFMAN: Y también la Legión de Super-Heroes, que creo que se acerca mucho más al concepto inicial de traerse de vuelta a los X-Men que lo que pueda parecer cuando comparamos a los mutantes con los Titanes. La idea de reunir a personajes de planetas diferentes es un concepto que se ha trasladado de forma muy simple al incorporar a personajes de diferentes países. Creo que los X-Men se parecen mucho más a la Legión que a los Titanes.

DECKER: ¿Qué se siente al escribir a personajes adolescentes? Creo que conscientemente no has intentado que...

WOLFMAN: No, no es mi objetivo.
 Esta es una serie sobre adolescentes que todo el mundo se puede leer. 

DECKER: Pero duplicas y exageras su jerga, y…

WOLFMAN: No, tampoco creo que lo esté haciendo, porque no sería capaz de hacerlo bien. Lo peor que podríamos haber hecho es intentar incorporar la jerga de 1982, porque se habría quedado desfasada en el mismo momento en el que se hubiese publicado la serie. El lector la habría odiado. Ni siquiera yo mismo sería capaz de creerme que en el mundo real los chavales hablan de esa forma, porque yo tampoco lo he hecho cuando era joven. Prefiero escribir a los personajes como adolescentes y que las historias hablen por sí solas. Mi trabajo se centra más en la historia y menos en una continuidad laberíntica. Y creo que eso se nota en que, hasta la fecha, la mayoría de las historias de los Titanes han estado compuestas por una o dos partes como mucho, lo que marca una gran diferencia con la mayoría del resto de cómics que se están publicando ahora mismo. En la serie algunas historias se han dividido en varias partes, pero tampoco muchas.

DECKER: Simplemente quería comentar que de vez en cuando haces uso del “slang”.

WOLFMAN: Muy raramente.
DECKER: ¿Puede Gar Logan transformarse en absolutamente cualquier cosa y usar su forma animal a conveniencia?

WOLFMAN: No. Si he entendido correctamente los poderes del personaje, y todo lo que sé proviene de revisar el material que aparecía en la Doom Patrol, tan sólo puede transformarse en formas animales. Y sí, sé que la próxima pregunta será: ¿puede entonces transformarse en una persona, ya que una persona también es un animal?”

DECKER: Aunque me parece que sería de color verde.

WOLFMAN: Sería de color verde.

DECKER: Probablemente podría transformarse en Brainiac 5.

WOLFMAN: Sí, aunque dudo que lo vaya a hacer alguna vez. Prefiero que se transforme en animales y ya está. El suero original de su padre biológico, Mark Logan, fue creado con la intención de quedarse exclusivamente vinculado a un código genético compartido entre humanos y animales. Supongo que es la única forma que es capaz de soportar. Sí, puede que en los números 24 y 25 lo hayamos convertido en un Gordaniano, porque algunas veces podrá utilizar mayor cantidad de poder, pero lo que no voy hacer es hacer que se convierta en otras personas.

DECKER: Bueno, en una de las escenas se transformaba en animales que nunca han existido y que se supone que son proyecciones de su mente.

WOLFMAN: Claro, era un momento puntual en el que había enloquecido, pero por lo general no es capaz de transformarse en algo parecido. Desde el primer momento en el que diseñé al personaje, sabía que no quería que se me escapase de las manos. Mi intención era que no se pudiese transformar en un animal demasiado grande y seguir permaneciendo durante mucho tiempo convertido en algo de ese tamaño. Tampoco quería que, si ocurría un caso parecido, pudiese revertir fácilmente a otra forma. Después de haberse convertido en un Tiranosaurio Rex, situación que probablemente nunca va a volver a pasar, deberían transcurrir varios días para que pueda recuperarse y ser capaz de volver a cambiar de forma. En realidad, me gusta más que se transforme en un ser más pequeño. Después de haber cometido ese error he empezado a preguntarme de dónde podría haber sacado tanta masa. Por otro lado, me parece bien que esa masa pueda desaparecer, como en las ocasiones en las que se ha transformado en insecto, pero no veo cómo podría ser capaz de convertirse en Tiranosaurio. Así que en el futuro intentaré evitar hacer algo similar. De nuevo, esta anécdota forma parte del proceso de aprendizaje. Si te atienes a lo que se ha hecho hasta el momento, creo que a largo plazo terminará por dañar la estabilidad interna de la serie. Tienes que aprender de las fortalezas y debilidades de tus personajes y hacer que se amolden a tus debilidades y puntos fuertes.

DECKER: Te lo he preguntado porque en el número trece de los Titanes, “Amazon Island, Paradise Island”, se transformaba en lo que parece ser una copia de un mortal Braqueosaurio.
WOLFMAN: Claro, era un Braqueosaurio.

DECKER: Claro, ¿pero mortal? Si comían plantas.

WOLFMAN: Bueno, ¿te gustaría que te golpease uno de ellos? Si conseguía hacerlo, te aseguro que sería mortal. No he dicho que fuese carnívoro [risas] y tampoco que se fuese a comer a sus enemigos. Creo que cualquier animal de cierto peso que se te acerque puede ser potencialmente mortal. De nuevo (como he dicho antes), probablemente no volverá a suceder algo parecido. Después de intentar hacerlo un par de veces, he terminado aprendiendo que transformar al personaje en un animal tan grande es un error.

DECKER: Perdóname si sueno como algo parecido a la
Brigada Boo Boo del tío Mart, pero...

WOLFMAN: No pasa nada, estoy seguro de que habré cometido algunos errores más.

DECKER: Por cierto, las ideas sobre Isla Paraíso me parecieron muy buenas. En todos los años en los que llevo leyendo Wonder Woman, es
 la primera vez que me ha parecido que conocía ese lugar, e incluso me ha llegado a gustar. 

WOLFMAN: Gracias. Ahora que soy el editor de Wonder Woman intentaré incorporar todas estas ideas a Isla Paraíso. Creo que es una buena localización, y la mitología de Wonder Woman también me parece estupenda. Me interesa mucho la mitología. Como editor de Wonder Woman, intentaré añadir nuevos elementos en el momento más oportuno. Tampoco es que duela mucho que el dibujo sea de George Pérez. Su estilo me parece absolutamente magnífico.

DECKER: Cierto, me encanta la armadura con la que dibuja a las Amazonas.

WOLFMAN: Las hace parecer diferentes. Las Amazonas ya no llevan esos diáfanos vestidos blancos que han estado usando durante los últimos 47.000 años. Desde luego, si están en mitad de una batalla, deberían llevar puesta una armadura.

DECKER: Era una historia en tres partes…

WOLFMAN: No, era en dos. Como he comentado antes, intento evitar las historias divididas en varias partes. Me gusta mantener las historias tan cerradas y herméticas como me resulte posible. Muy pocas de ellas han sobrepasado más de un número. Una o dos tuvieron dos partes y eso fue todo.

DECKER: Parece que la idea central es la de que las Amazonas y los Viejos Dioses están intentando derrocar a los Nuevos, algo que me hizo preguntarme si definitivamente existe un conflicto generacional en la serie. Además me hizo pensar en el conjunto de la colección. Parece como si ya estuviese completamente planeado. Uno de los temas fundamentales de la serie es la forma en la que la generación más joven es capaz de oponerse a la anterior.

WOLFMAN: Creo que esa puede ser la idea principal. He intentado no exagerarlo demasiado, aunque puede que se me fuese la mano un poco en el número veinte, pero ya he tratado otras veces el conflicto entre padres e hijos. Cuando trabajas con personajes adolescentes, una de las cosas que tienes que determinar es si se debería ignorar el hecho de que son adolescentes o si deberías jugar con ellos solo como personajes y nada más (y no me refiero a jugar con las expectativas del público adolescente). En los números anteriores quería tratar la adolescencia y se me ocurrió la idea del conflicto generacional. He intentado revisar tanto los ángulos positivos como los negativos. Algunos de los personajes tienen elementos muy positivos. Pero me parece que lo exageré demasiado, y quiero intentar evitarlo en el futuro. Durante el proceso de aprendizaje tienes que fijarte bien en todos los detalles para no sobrepasar los límites. Y en esa saga estaba empezando a sobrepasarlos.
DECKER: Ahora que lo pienso, en la serie se pueden ver como una docena de casos en los que alguien entra en conflicto con la generación anterior.

WOLFMAN: Estoy seguro de que estás en lo cierto. Pero ya no se volverán a ver tan asiduamente.

DECKER: Eso nos lleva hasta otro punto. Parece que bastantes historias están centradas en cómo los buenos empiezan a ser controlados por los chicos malos para de esa forma poder atacar a otros chicos buenos haciendo uso de los primeros.

WOLFMAN: Creo que esa situación sólo ha ocurrido un par de veces, y fue en los primeros nueve números. Me parece que no he vuelto a utilizar un recurso parecido desde entonces. Normalmente no me gustan ese tipo de argumentos e intento alejarme de ellos. Pero algunas de las historias que he escrito desde entonces, después del número once, no se le parecen ni por asomo. He escrito acerca de muchas otras cosas y creo que ese es el motivo por el que los Titanes se han acabado convirtiendo en una serie mucho más realista.

DECKER: Pero parece como si abundasen las historias en las que alguien se encuentra bajo el control de otro, no necesariamente bajo el control de uno de los chicos malos.

WOLFMAN: Claro, también me he dado cuenta.

DECKER: Como en esa historia en la que Raven controlaba a Kid Flash

WOLFMAN: Hicimos esa historia con toda la intención para conseguir definir bien la personalidad de los personajes. No se trataba tanto de que quisiéramos mostrar que ella perdía el control como que el lector se diese cuenta del vínculo que se había creado entre ambos personajes. A menudo las historias de control, las llamadas historias del titiritero, son historias muy sencillas. Por ejemplo, las historias de la Liga de la Justicia, esas que giran alrededor de una idea tan pasada de moda. En cuanto he conseguido hacerme con las riendas de los personajes he intentado evitar meterme en terrenos tan enfangados. Lo que estamos haciendo George y yo es explorar nuevos territorios del género de superhéroes. Resulta difícil, muy difícil, porque Marvel lleva funcionando desde hace veinte años y lo ha intentado prácticamente todo, mientras que DC también lleva cuarenta años en el negocio. Resulta difícil encontrar algo nuevo, pero creo que nosotros lo hemos hecho, hemos dado con un entorno novedoso a partir del que poder construir a nuestros personajes y aportar elementos que nunca se habían visto hasta ahora. Y para hacerlo hemos tenido que ser capaces de entender perfectamente cómo se sienten nuestros personajes, intentando ir más allá de la inseguridad que pueda sentir La Cosa por el hecho de ser un monstruo o de lo que pueda sentir Spider-Man cuando se culpabiliza de lo que está ocurriendo a su alrededor. En el pasado, todos esos elementos bastaban para conseguir desarrollar al personaje. Pero en realidad no era una caracterización, sino una especie de forma de embutir problemas en su interior. No creo que problemas y desarrollo de personaje sean lo mismo. Nosotros tan sólo estamos empezando. Al menos George y yo estamos intentando profundizar en los personajes más allá de que estén sufriendo algunos problemas superficiales.
DECKER: Creo que con esta serie habéis conseguido el equivalente a una familia, y la idea de que alguien de la familia se convierta en un traidor o en un renegado suele ser...

WOLFMAN: Estoy intentando evitar ese tema todo lo que puedo. Todavía no hay ninguno de ellos que se haya convertido en un enemigo del grupo. Y me parece que tampoco lo vamos a ver en el futuro, porque se ha hecho muchas veces antes.

DECKER: Supongo que es un tema demasiado potente, lo reduce todo a una cuestión tremendamente básica.

WOLFMAN: Y lo es, pero a menos que podamos llevarlo a cabo de una forma completamente original, prefiero evitarlo, porque ya se ha hecho antes hasta aburrir a las ovejas.

DECKER: La caracterización de Kory… no estoy demasiado seguro de cómo se pronuncia su nombre.

WOLFMAN: Kor-e-an-door. Se escribe de forma diferente porque el nombre proviene de una especia. Es la primera vez que revelo este dato. Al principio era C-o-r-i-a-n-d-e-r, y luego lo volví a rehacer.

DECKER: Su personalidad resulta interesante, ya que casi es como una ninfa muy desarrollada.

WOLFMAN: Sí, forma parte de su personalidad. También es muy inocente; ha sido torturada y ha sufrido muchos problemas de todo tipo, aunque su personalidad básica no se ha visto afectada. Supongo que en algún momento íbamos a convertirla en una verdadera ninfa, aunque tampoco es la típica que se iría a la cama con cualquiera.
DECKER: Me parece un personaje muy interesante, y no es que se hayan visto muchos parecidos en este medio. Es como una ninfa diseñada de forma inteligente. Mi intención no era preguntar sobre algún rasgo específico, tan solo quería charlar un poco sobre el personaje.

WOLFMAN: He intentado idear un entorno más amplio para los tres nuevos personajes que he creado para la serie de los Titanes. En televisión y en el cine dirían que son argumentos secundarios. En el caso de Cyborg he intentado ofrecer un entorno más realista. Sin duda, Raven y Starfire provienen del género de la ciencia ficción, y por lo tanto son bastante menos realistas. Por eso me gustan estos tres nuevos, porque tienen una base más rica con la que poder jugar. En [La Tumba de] Drácula intenté hacer algo parecido: idear un entorno completo antes incluso de comenzar con el primer número del título. Durante los cuatro próximos números vamos a poder ver cómo ha sido la vida de Kory hasta el momento.
La trama de Starfire en Tamaran, que transcurre en el último número de la mini-saga, ya estaba desarrollada en su mayor parte antes de que saliese a la calle el primer número. Sabíamos qué es lo que la había ocurrido, cómo se había escapado, cómo había sido torturada, todo lo relacionado con su hermana. Quería que el personaje hubiese atravesado todas esas situaciones y que más o menos tuviese un carácter positivo, sin fijarse necesariamente en una visión pesimista de las cosas a pesar de haber sufrido los efectos de una guerra. Es una dicotomía singular, y en cierto modo estamos manejando al personaje como lo hacen los japoneses: ella es capaz de amar la belleza de la naturaleza y luego puede darse la vuelta y rebanar la cabeza de alguien de arriba abajo sin miramientos, aunque una cosa no parece contrastar con la otra.


(Continuará)

3 comentarios:

MikelC. dijo...

Muy buenas estas entrevistas "largas". Son una gozada. Ahora mismo estoy con la de Matt Wagner, que tenia aparcada y la estoy disfrutanto un moton.

Felicitarte por el currelo que te metes con la traducción.

frog2000 dijo...

¡Muchas gracias!

PAblo dijo...

Muy interesante la nueva entrevista a Wolfman.

Creo que tiene bastante razón en su respuesta sobre la comparación de los Titanes con los nuevos X-Men de Claremont, siendo la verdadera inspiración de estos La Legión.

Sin duda, un gran guionista sin duda. Espero que en próximas entregas explique los intringulís de su marcha de Marvel.

Impacientes Saludos.

NUEVA YORK EN EL DAREDEVIL DE FRANK MILLER

"Investigué mucho para hacer un buen trabajo. Si me pedían que dibujara una cascada, iba hasta una y la dibujaba. Esto es algo que a...