La primera vez que escuché a Chicken Snake me pareció el enésimo intento sin chicha de exprimir la vaca del revival. Para mí Jerry Teel había fallado miserablemente por segunda vez (el otro error fue el hiper-producido segundo LP de Knoxville Girls). La voz de Pauline era un elemento novedoso que, sin embargo, me hacía recordar con nostalgia aquellos duetos que idearon los Honeymoon Killers del de la chistera y Lisa. De tan aguda, el tono de la mujer del líder de Chicken Snake llegaba a irritarme. Y encima, las estructuras country que el grupo machacaba se me asemejaban a las de demasiadas bandas de garage especializadas en llevarnos de vuelta al pasado. Como ves, todo parecía refrito. Y puede que la culpa (y no menor) fueran los desangelados mp3 que había escuchado apresuradamente en el curro, su calidad ínfima no me había hecho disfrutar del todo la pócima acústica que había cocinado el grupo con tanto mimo y que sí que podía apreciarse en vinilo...
En cuanto compré “Lucky Hand” (ya que colecciono todo aquello en lo que participa el antiguo propietario de los estudios Funhouse) y lo solté sobre el gira-discos, el armatoste sonoro se destapó como uno de los discos más admirables de aquel 2010. Las canciones seguían siendo parecidas a las que ya hemos escuchado hasta la extenuación otras veces, pero éstas miran hacia delante con las hechuras de los maestros, están más abolladas, no son mera fotocopia ni evocación... aunque se puedan ver los referentes (Gun Club en concreto) el grupo exuda bastante óxido, interés o mala hostia (el ex-cantante de Honeymoon Killers no es alguien que haya tenido la vida muy fácil, ya sea por las drogas o por el Katrina) como para dejarnos satisfechos tanto a sus incondicionales como a los que no lo son. Aquí estamos hablando de sutileza. Estamos hablando de unas canciones que son levemente frescas, aunque funcionan muy bien por sí mismas. Nadie más que Chicken Hand podría haber conseguido que nos tragásemos un disco enterito de estas características sin aburrirnos. Y con la música atronando las cuatro paredes de mi sala de estar pude darme cuenta de que la voz de Pauline puntea nerviosa la de su marido y que queda estupendo, y ratifiqué de nuevo que Jerry Teel, perro viejo, sencillamente vende a través de sus innumerables grupos nada más y nada menos que a Jerry Teel, tanto su particular estilo a la guitarra (o bajo) como su voz (tan personal como la de Don Howland). Otro acierto, Jerry, nos dejas anhelando a ver qué tal tu segunda obra con las serpientes pollo, que está a puntito de ser editado.
*** Entrevista traducida en Frog2000
*** Jerry & Pauline Teel: Ain´t No Liar
*** 1º LP (LUCKY HAND): Rampant Street Blues
*** 2º LP (TROUBLE IN MY DOORSTEP): If The Creek Don´t Rise
1 comentario:
"Para mí Jerry Teel había fallado miserablemente por segunda vez (el otro error fue el hiper-producido segundo LP de Knoxville Girls)"
No, no, y mil veces no! Puto lo-fi de los cojones! Si en un grupo están Kid Congo y Bob Bert (mi batería preferido junto a Epic Soundtracks), kiero oirlos! Kiero escuchar la distorsión de la guitarra y el retumbar de los tambores. Y no una especie de maraña grumosa sin matices. Ke conste ke no estoy cabreado contigo (sobre gustos...), y ke no haya disfrutado como un cerdo con discos lo-fi, pero muchas veces me he kedado con la sensación de perderme grandes canciones por el esnobismo de algunos. Coño, ke hoy en día cualkier matao puede grabar un disco en condiciones!
Bueno...je,je. Todo esto para decir ke me gusta mucho más el segundo ke el primero.
Saludos y a seguir con el pedazo blog!
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