Realizada por Kurt Amacker para Mania (2007), traducida por Frog2000.
Después de más de un año de retraso, La Liga de los Hombres Extraordinarios: Dossier Negro, de Alan Moore y Kevin O'Neill, llegará a las tiendas de cómics el próximo miércoles, 14 de noviembre. "Dossier Negro" ha sido fuente de controversia y especulación desde que Moore anunció su marcha de DC Comics y de su subsello, Wildstorm, en junio de 2005. Después de que el productor Joel Silver anunciase falsamente la participación del autor en la película de V de Vendetta, Moore exigió una rectificación y una disculpa. Mientras que Warner Brothers retiró su nombre de la página web de la película, la disculpa o la rectificación pública nunca llegaron. Moore anunció sus intenciones de abandonar DC y llevarse a La Liga de los Hombres Extraordinarios con él a Top Shelf Productions. Con un tercer volumen anunciado y planificado que finalmente será editado por Top Shelf, todo parecía empezar a encajar. Pero Moore y O'Neill le debían a DC "Dossier Negro", un tomo que se ensambla perfectamente entre el segundo volumen de 2002 y el próximo tercer volumen de la serie. En serio, parecen matemáticas de comic book. Moore y O'Neill continuaron trabajando en el tomo tan sólo para descubrir que sufriría ciertos retrasos y que provocaría toda una controversia dentro de DC, por lo que su edición sería postergada. Y aunque los detalles siguen siendo vagos, el editor de Wildstorm, Scott Dunbier, se ha marchado recientemente de DC, al parecer por culpa de los problemas que rodeaban a "Dossier Negro". Hace poco pasé una agradable tarde con el señor Moore al teléfono, quien me explicó con gran detalle la historia detrás del tomo y toda la controversia que lo rodea, además de sus planes y los del Sr. O'Neill para el próximo tercer volumen de la Liga de los Hombres Extraordinarios.
Kurt Amacker: La verdad es que se ha generado demasiada controversia y expectación a cuenta de "La Liga de los Hombres Extraordinarios: Dossier Negro". El tomo ha sufrido retrasos en varias ocasiones desde tu marcha de DC, y también ha generado cierta confusión sobre qué edición va a aparecer primero. Incluso Scott Dunbier ha abandonado Wildstorm, supuestamente por circunstancias directamente relacionadas con el tomo. Me gustaría saber si puedes comentarle a nuestros lectores tu versión de qué es lo que ocurrió con "Dossier Negro" y cuál es la historia de su creación anterior a su publicación el día 14 de noviembre.
Alan Moore: Dossier Negro es un proyecto cuyos orígenes empiezan nada más finalizar el segundo volumen de La Liga de los Hombres Extraordinarios. Recuerdo que Kevin estaba acabando y dando los últimos retoques a las páginas finales de ese segundo volumen. Y entonces nos pusimos a charlar por teléfono, riéndonos por el hecho de que ahora nos encontrábamos técnicamente sin trabajo, porque ni siquiera habíamos planeado lanzar el tercer volumen en algún momento del futuro. Después de colgar el teléfono, la idea de que Kevin tuviese que acudir a la oficina de empleo para aprender nuevas habilidades me produjo tal angustia que me pregunté si había algo que pudiese idear para que tuviese algo que hacer, esperando que tampoco le supusiera demasiado trabajo. Ese fue el comienzo de toda esta idea delirante, porque cualquier cosa que tenga que ver con La Liga de los Hombres Extraordinarios siempre conlleva una increíble cantidad de trabajo. Al principio quería hacer algo así como un libro de consulta. Después de cinco minutos me di cuenta de que no iba a funcionar porque las Guías siempre parecen una basura. Son aburridas, y en parte es porque no tienen contenido narrativo alguno. No son más que una lista de hechos triviales sobre los personajes. Así que pensamos que tal vez una forma de crear algo similar sería incluir el material de nuestro libro de consulta pero ubicándolo dentro de una narrativa que relatara el robo de un expediente que pertenecía a la Inteligencia Militar Inglesa compuesto por información variada acerca de las diversas encarnaciones de la Liga. En esencia sería el propio Dossier Negro, donde se incluiría la historia en forma de cómic de ese intento de robo del documento y la persecución que a continuación tendría lugar por toda Gran Bretaña.
Entonces la idea principal empezó a agigantarse hasta convertirse en algo cada vez más elaborado. Rápidamente nos dimos cuenta de que teníamos entre manos un concepto potencialmente fascinante. Si conseguíamos elaborarlo de la forma en que esperábamos, tendría tantos elementos diferentes que ya no sería un comic book. Por otra parte tampoco sería una obra de texto. Planeamos incorporar varios elementos a la obra, cosas como un single de vinilo de siete pulgadas, una sección en 3-D y una Biblia de Tijuana que iría empaquetada de forma separada tal y como se la podría haber imaginado el Departamento de Pornografía del Ministerio de la Verdad de George Orwell en 1984. Nos apresuramos a contarle el proyecto a Wildstorm, sello donde en ese momento estábamos muy contentos de dejar que publicasen la Liga de los Hombres Extraordinarios, a pesar de que el resto de mis compromisos con las series de ABC ya hubiesen finalizado. La idea del tomo les entusiasmó, y le dijeron a Kevin que no lo anunciarían hasta que hubiese terminado la última página. Me parece muy sensato, porque posiblemente, algunos de los mejores dibujos artísticos de Kevin se pueden encontrar en este volumen, aunque el resto de los que ha hecho para la serie no sean moco de pavo. Así que no tendría mucho sentido que tuviese que ponerse a dibujar deprisa y corriendo para cumplir un plazo de entrega bastante arbitrario, lo que iría en detrimento de una obra que va a seguir con nosotros durante mucho tiempo. Esta obra está hecha para durar, y creo que habría sido ridículo que fuese menos de lo que es por el simple capricho de un editor. Así que ese fue el acuerdo al que llegamos y bajo el que Kevin empezó el proyecto. Pero justo hacia el final de mi escritura del guión para "Dossier Negro", la innecesaria controversia y la furia estallaron por culpa de la película de V de Vendetta.
KA: ¿Fue cuando Joel Silver afirmó que de alguna manera estabas asociado con la película?
AM: Sí. Incluso en ese momento, todavía me encontraba en un punto con DC en el que, a pesar de que no quería trabajar más para ellos, estaba muy contento con la forma en que Wildstorm había editado los dos volúmenes anteriores de la Liga de los Hombres Extraordinarios. Y a menos que hubiese algo que me recordara que la serie estaba siendo publicada por DC, Kevin y yo estaríamos contentos de dejar que Wildstorm la siguiese publicando. Pero cuando estallaron los hechos relacionados con la película de V de Vendetta, empecé a considerarlo como un recordatorio de que todavía seguíamos conectados a DC Comics. Les ofrecí un montón de oportunidades para que arreglasen las cosas que de verdad que no me parecían tan terriblemente exigentes. Y al final, por lo menos terminaron quitando mi nombre de la película. Desafortunadamente no me hicieron llegar ningún tipo de disculpa ni nada parecido. Entonces les dije: "Está bien, acabaremos “Dossier Negro” y luego nos llevaremos la serie a otro editor. Nos mudaremos a Top Shelf.”
Fue en esa época cuando parece que DC empezó a tener una actitud diferente respecto a “Dossier Negro”. Kevin comenzó a recibir llamadas telefónicas de personas del departamento de marketing, algo que parece un poco raro, porque nunca, en todos mis años trabajando para DC (y lo mismo le había ocurrido a Kevin), habíamos formado parte de plan de marketing alguno. Nunca nos publicitaron ni nada parecido, excepto por un par de anuncios de la casa. Pero al parecer estas personas empezaron a telefonear a Kevin haciendo algunas observaciones muy cortantes acerca de su lentitud a la hora de acabar la obra, que durante todo ese tiempo se había estado llevando a cabo bajo el entendimiento mutuo de que no debíamos recibir presión de ningún tipo, y con el convencimiento de que no se anunciaría hasta que las páginas finales no se hubiesen acabado. Pero de repente empezaron a presionar a Kevin, y también empezaron a producirse algunos extraños silencios cuando éste les hacía preguntas sobre cómo se estaba llevando a cabo todo lo relacionado con el resto de la producción, específicamente todo aquello que tenía que ver con la sección en 3-D, que Kevin había terminado justo al comienzo para luego retroceder y abordar un par de secciones perdidas en las entrañas del tomo. La sección en 3-D suponía la conclusión de la obra. Pero Kevin había conseguido terminarla justo al empezar, porque ya que se debía hacer con el sofisticado enfoque en 3-D que nosotros reclamábamos, era bastante razonable pensar que únicamente se podría encargar a alguien de la talla de Ray Zone. Además, pensábamos que llevaría un tiempo conseguir que se hiciera realidad. Por eso Kevin la acabó justo al principio. Pero ahora, cuando les preguntábamos qué tal se estaba desarrollando esa sección, Kevin se encontró con una sucesión de silencios desconcertantes. Y pasado un tiempo nos enteramos de que al parecer, habían decidido que sería mucho mejor hacer esa parte en 3-D de forma más barata, en la propia empresa. Y eso a pesar del hecho de que Ray Zone había aceptado encargarse del trabajo completamente entusiasmado. Al parecer, sólo después de ver el guión auténtico, que como ya habíamos dicho necesitaba algunos de los tratamientos del proceso en 3-D más exigentes e inusuales que sólo Ray Zone sería capaz de llevar a cabo, llegaron a la conclusión de que en realidad no estaban completamente equipados como para hacer frente al proceso en 3-D, por lo que sería mejor volver a pasarle el proyecto a Ray Zone. Todo esto retrasó mucho las cosas, por lo que resulta que aunque Kevin había conseguido hacer su trabajo en el plazo poco razonable que le habían exigido, ellos no podrían editar la obra a tiempo.
Creo que Dossier Negro es muy interesante, porque marca todo un punto de transición radical. Quiero decir, estamos saliendo de ese territorio que nos resulta tan familiar y obviamente muy comercial de la época victoriana. Nos hemos deshecho de los personajes más populares y visuales, como Mr. Hyde, el Hombre Invisible y el Capitán Nemo. Es territorio completamente nuevo.
En cuanto empezamos a explorar el paisaje de ficción de la década de 1950, nos dimos cuenta de que era tan exótico y tan maravilloso como el de la época victoriana. Por otro lado, cuando estábamos haciendo nuestra historia victoriana nos vimos bastante limitados al tener que utilizar las figuras literarias de la época. Ahora, a medida que avanzamos por el S. XX con el primer libro del nuevo volumen 3 de La Liga, situado en 1910, estamos en condiciones de utilizar elementos del Teatro de la época y de algunas de las primeras películas mudas de ese período. Y por supuesto, a medida que nos acerquemos a 1958 tendremos disponible una gran cantidad de series de televisión y películas a las que podemos hacer referencia y utilizar personajes y situaciones de las mismas. Así que fue muy interesante hacer Dossier Negro y ver que sí, que estos personajes -este concepto- también funciona en el mundo moderno. Me refiero a que funciona en la medida en que 1958 es un poco más parecido al mundo moderno que 1898.
(Continuará)
Después de más de un año de retraso, La Liga de los Hombres Extraordinarios: Dossier Negro, de Alan Moore y Kevin O'Neill, llegará a las tiendas de cómics el próximo miércoles, 14 de noviembre. "Dossier Negro" ha sido fuente de controversia y especulación desde que Moore anunció su marcha de DC Comics y de su subsello, Wildstorm, en junio de 2005. Después de que el productor Joel Silver anunciase falsamente la participación del autor en la película de V de Vendetta, Moore exigió una rectificación y una disculpa. Mientras que Warner Brothers retiró su nombre de la página web de la película, la disculpa o la rectificación pública nunca llegaron. Moore anunció sus intenciones de abandonar DC y llevarse a La Liga de los Hombres Extraordinarios con él a Top Shelf Productions. Con un tercer volumen anunciado y planificado que finalmente será editado por Top Shelf, todo parecía empezar a encajar. Pero Moore y O'Neill le debían a DC "Dossier Negro", un tomo que se ensambla perfectamente entre el segundo volumen de 2002 y el próximo tercer volumen de la serie. En serio, parecen matemáticas de comic book. Moore y O'Neill continuaron trabajando en el tomo tan sólo para descubrir que sufriría ciertos retrasos y que provocaría toda una controversia dentro de DC, por lo que su edición sería postergada. Y aunque los detalles siguen siendo vagos, el editor de Wildstorm, Scott Dunbier, se ha marchado recientemente de DC, al parecer por culpa de los problemas que rodeaban a "Dossier Negro". Hace poco pasé una agradable tarde con el señor Moore al teléfono, quien me explicó con gran detalle la historia detrás del tomo y toda la controversia que lo rodea, además de sus planes y los del Sr. O'Neill para el próximo tercer volumen de la Liga de los Hombres Extraordinarios.
Kurt Amacker: La verdad es que se ha generado demasiada controversia y expectación a cuenta de "La Liga de los Hombres Extraordinarios: Dossier Negro". El tomo ha sufrido retrasos en varias ocasiones desde tu marcha de DC, y también ha generado cierta confusión sobre qué edición va a aparecer primero. Incluso Scott Dunbier ha abandonado Wildstorm, supuestamente por circunstancias directamente relacionadas con el tomo. Me gustaría saber si puedes comentarle a nuestros lectores tu versión de qué es lo que ocurrió con "Dossier Negro" y cuál es la historia de su creación anterior a su publicación el día 14 de noviembre.
Alan Moore: Dossier Negro es un proyecto cuyos orígenes empiezan nada más finalizar el segundo volumen de La Liga de los Hombres Extraordinarios. Recuerdo que Kevin estaba acabando y dando los últimos retoques a las páginas finales de ese segundo volumen. Y entonces nos pusimos a charlar por teléfono, riéndonos por el hecho de que ahora nos encontrábamos técnicamente sin trabajo, porque ni siquiera habíamos planeado lanzar el tercer volumen en algún momento del futuro. Después de colgar el teléfono, la idea de que Kevin tuviese que acudir a la oficina de empleo para aprender nuevas habilidades me produjo tal angustia que me pregunté si había algo que pudiese idear para que tuviese algo que hacer, esperando que tampoco le supusiera demasiado trabajo. Ese fue el comienzo de toda esta idea delirante, porque cualquier cosa que tenga que ver con La Liga de los Hombres Extraordinarios siempre conlleva una increíble cantidad de trabajo. Al principio quería hacer algo así como un libro de consulta. Después de cinco minutos me di cuenta de que no iba a funcionar porque las Guías siempre parecen una basura. Son aburridas, y en parte es porque no tienen contenido narrativo alguno. No son más que una lista de hechos triviales sobre los personajes. Así que pensamos que tal vez una forma de crear algo similar sería incluir el material de nuestro libro de consulta pero ubicándolo dentro de una narrativa que relatara el robo de un expediente que pertenecía a la Inteligencia Militar Inglesa compuesto por información variada acerca de las diversas encarnaciones de la Liga. En esencia sería el propio Dossier Negro, donde se incluiría la historia en forma de cómic de ese intento de robo del documento y la persecución que a continuación tendría lugar por toda Gran Bretaña.
Entonces la idea principal empezó a agigantarse hasta convertirse en algo cada vez más elaborado. Rápidamente nos dimos cuenta de que teníamos entre manos un concepto potencialmente fascinante. Si conseguíamos elaborarlo de la forma en que esperábamos, tendría tantos elementos diferentes que ya no sería un comic book. Por otra parte tampoco sería una obra de texto. Planeamos incorporar varios elementos a la obra, cosas como un single de vinilo de siete pulgadas, una sección en 3-D y una Biblia de Tijuana que iría empaquetada de forma separada tal y como se la podría haber imaginado el Departamento de Pornografía del Ministerio de la Verdad de George Orwell en 1984. Nos apresuramos a contarle el proyecto a Wildstorm, sello donde en ese momento estábamos muy contentos de dejar que publicasen la Liga de los Hombres Extraordinarios, a pesar de que el resto de mis compromisos con las series de ABC ya hubiesen finalizado. La idea del tomo les entusiasmó, y le dijeron a Kevin que no lo anunciarían hasta que hubiese terminado la última página. Me parece muy sensato, porque posiblemente, algunos de los mejores dibujos artísticos de Kevin se pueden encontrar en este volumen, aunque el resto de los que ha hecho para la serie no sean moco de pavo. Así que no tendría mucho sentido que tuviese que ponerse a dibujar deprisa y corriendo para cumplir un plazo de entrega bastante arbitrario, lo que iría en detrimento de una obra que va a seguir con nosotros durante mucho tiempo. Esta obra está hecha para durar, y creo que habría sido ridículo que fuese menos de lo que es por el simple capricho de un editor. Así que ese fue el acuerdo al que llegamos y bajo el que Kevin empezó el proyecto. Pero justo hacia el final de mi escritura del guión para "Dossier Negro", la innecesaria controversia y la furia estallaron por culpa de la película de V de Vendetta.
KA: ¿Fue cuando Joel Silver afirmó que de alguna manera estabas asociado con la película?
AM: Sí. Incluso en ese momento, todavía me encontraba en un punto con DC en el que, a pesar de que no quería trabajar más para ellos, estaba muy contento con la forma en que Wildstorm había editado los dos volúmenes anteriores de la Liga de los Hombres Extraordinarios. Y a menos que hubiese algo que me recordara que la serie estaba siendo publicada por DC, Kevin y yo estaríamos contentos de dejar que Wildstorm la siguiese publicando. Pero cuando estallaron los hechos relacionados con la película de V de Vendetta, empecé a considerarlo como un recordatorio de que todavía seguíamos conectados a DC Comics. Les ofrecí un montón de oportunidades para que arreglasen las cosas que de verdad que no me parecían tan terriblemente exigentes. Y al final, por lo menos terminaron quitando mi nombre de la película. Desafortunadamente no me hicieron llegar ningún tipo de disculpa ni nada parecido. Entonces les dije: "Está bien, acabaremos “Dossier Negro” y luego nos llevaremos la serie a otro editor. Nos mudaremos a Top Shelf.”
Fue en esa época cuando parece que DC empezó a tener una actitud diferente respecto a “Dossier Negro”. Kevin comenzó a recibir llamadas telefónicas de personas del departamento de marketing, algo que parece un poco raro, porque nunca, en todos mis años trabajando para DC (y lo mismo le había ocurrido a Kevin), habíamos formado parte de plan de marketing alguno. Nunca nos publicitaron ni nada parecido, excepto por un par de anuncios de la casa. Pero al parecer estas personas empezaron a telefonear a Kevin haciendo algunas observaciones muy cortantes acerca de su lentitud a la hora de acabar la obra, que durante todo ese tiempo se había estado llevando a cabo bajo el entendimiento mutuo de que no debíamos recibir presión de ningún tipo, y con el convencimiento de que no se anunciaría hasta que las páginas finales no se hubiesen acabado. Pero de repente empezaron a presionar a Kevin, y también empezaron a producirse algunos extraños silencios cuando éste les hacía preguntas sobre cómo se estaba llevando a cabo todo lo relacionado con el resto de la producción, específicamente todo aquello que tenía que ver con la sección en 3-D, que Kevin había terminado justo al comienzo para luego retroceder y abordar un par de secciones perdidas en las entrañas del tomo. La sección en 3-D suponía la conclusión de la obra. Pero Kevin había conseguido terminarla justo al empezar, porque ya que se debía hacer con el sofisticado enfoque en 3-D que nosotros reclamábamos, era bastante razonable pensar que únicamente se podría encargar a alguien de la talla de Ray Zone. Además, pensábamos que llevaría un tiempo conseguir que se hiciera realidad. Por eso Kevin la acabó justo al principio. Pero ahora, cuando les preguntábamos qué tal se estaba desarrollando esa sección, Kevin se encontró con una sucesión de silencios desconcertantes. Y pasado un tiempo nos enteramos de que al parecer, habían decidido que sería mucho mejor hacer esa parte en 3-D de forma más barata, en la propia empresa. Y eso a pesar del hecho de que Ray Zone había aceptado encargarse del trabajo completamente entusiasmado. Al parecer, sólo después de ver el guión auténtico, que como ya habíamos dicho necesitaba algunos de los tratamientos del proceso en 3-D más exigentes e inusuales que sólo Ray Zone sería capaz de llevar a cabo, llegaron a la conclusión de que en realidad no estaban completamente equipados como para hacer frente al proceso en 3-D, por lo que sería mejor volver a pasarle el proyecto a Ray Zone. Todo esto retrasó mucho las cosas, por lo que resulta que aunque Kevin había conseguido hacer su trabajo en el plazo poco razonable que le habían exigido, ellos no podrían editar la obra a tiempo.
Kevin consiguió acabar el trabajo en enero del año pasado. El tomo estaba casi listo para ir a imprenta. Pero de repente DC decidió que era “más un título para la campaña de Navidad”, aunque no sé cómo llegaron a esa conclusión. No sé si creían que iba a haber nieve y ramitas de acebo en las letras del título o algo por el estilo. Pero aún así decidieron que ahora el libro aparecería por Navidad, lo que significaba que la publicación se retrasaría varios meses. No entendíamos bien de qué iba todo esto, pero no tuvimos más remedio que plegarnos a la situación. Luego Kevin comenzó a trabajar en el tercer volumen de la Liga para Top Shelf, el cuál está marchando a buen ritmo. Ya he escrito los dos primeros capítulos de tres. Y tal y como tenemos entendido, el departamento jurídico de DC también tuvo algunos pequeños problemillas con temas como la inclusión de Billy Bunter, un popular personaje colegial británico que apareció en el mercado inglés entre principios del Siglo XX hasta los años cincuenta. Kevin ya les dijo en su momento que en realidad Billy Bunter era propiedad de Amalgamated Press, que había sido comprada por Fleetway Publications, que fue comprada a su vez por la división de historietas de IPC Media, que fue comprada por Warner Brothers, que son los propietarios de DC Comics. Así que Kevin les explicó que como mucho, era un problema entre departamentos. Finalmente, después de unos seis meses más de preocupaciones por el tema de Billy Bunter, con el tiempo terminaron por darse cuenta de lo que ocurría ellos mismos. Pero todavía había un par de cosas más que abordar. A pesar de que pensábamos que eran problemas menores, tuvimos que solucionarlos y procedimos a hacerlo. Fue entonces cuando enviamos el volumen a imprenta para que se editase en algún momento a principios de septiembre del año pasado. Y entonces, dos semanas antes de que saliese hacia imprenta, de repente Kevin recibió un montón de comunicados urgentes donde le indicaban que el departamento legal de DC había echado un vistazo al libro y estaba bastante preocupado por alguno de los personajes de su país que aparecían en la obra, aunque hacía un par de meses nos habían asegurado que el departamento legal había dado autorización al proyecto, así que sólo podíamos suponer que alguien -por alguna razón- decidió echar otra mirada más al tomo para ver si había algo que de alguna manera, podría impedir su progreso o bien sabotearlo de alguna forma insignificante. La verdad es que todo esto me parece bastante irritante. Le dijeron a Kevin que tenía que realizar pequeños cambios en la obra o en el coloreado. Por ejemplo, en un segundo plano de una escena de la fiesta –una muy, muy pequeña- aparecía un personaje que era el Llanero Solitario usando gafas 3-D en lugar de una máscara. Nos dijeron que era un personaje con derechos de autor y que no podían permitir que apareciese en la obra. Les dijimos: "Bueno, en realidad no es el Llanero Solitario con gafas 3-D sino sólo un vaquero con gafas 3-D". Pero tuvimos que cambiarle el color del traje. Todo esto no era demasiado importante, pero nos pareció tan trivial como irritante. Nos avisaron de numerosas cosas por el estilo, incluyendo la vez en que afirmaron que a menos que estuviésemos dispuestos a quitar los nombres de los personajes principales de toda una sección completa (o que los sustituyésemos por otros), el tomo no se podría publicar en Gran Bretaña. Todo esto nos lo dijeron de forma bastante repentina y después de que hubiese ocurrido todo lo anterior. Nos parece como si con toda probabilidad, todo fuese culpa de una incompetencia casi increíble o una increíble mezquindad y malicia, tan sólo por el hecho de que ahora íbamos a coger la serie que nos pertenece y llevárnosla a Top Shelf. Es un país libre, y tal y como yo lo entiendo, cuando eres dueño de tu propiedad estás en tu derecho de hacerlo.
También ocurrió algo parecido cuando Melinda Gebbie y yo hicimos una historia de Cobweb donde aparecía material acerca del ocultista y científico espacial Jack Parsons, incluyendo su relación con Lafayette Ron Hubbard. En esa ocasión DC me tuvo sujeto algunas horas hablando por teléfono con su departamento legal, repasando cada elemento de la historia de seis páginas, mientras yo les informaba que era cierto, que el mago de la Corte de Elizabeth I, John Dee, ya estaba muerto, y que no debían preocuparse porque sus abogados les fuesen a demandar. Diseñamos la historia de forma meticulosa, y su departamento legal, algo que le honra, dijo que no había ningún problema en absoluto, hasta que el editor de DC, Paul Levitz, intervino y dijo que seguía sin ver claro si iba a poder publicar con completa seguridad esa historia, y eso a pesar de estar asesorado por su propio departamento legal.
En cuanto a Dossier Negro, nos parecía probable que estuviese ocurriendo algo parecido, que todo esto sólo fuesen un montón de pequeños líos y que al final no habría demasiada diferencia en cuanto a cómo iba a ser publicado el tomo o donde iba a serlo. Por lo tanto, hemos hecho un par de cambios en Dossier Negro, aunque de mala gana, porque creemos que eran innecesarios. Pero como has señalado, terminará apareciendo el 14 de noviembre. Aparecerá en todas partes excepto en Inglaterra.
KA: ¿No había alguna cuestión relacionada con los derechos de autor conectada con la marcha de Scott Dunbier de Wildstorm?
AM: En realidad no sé lo que ha ocurrido con Scott Dunbier. Me refiero a que tengo la sensación de que Kevin y yo estamos poco informados sobre algunos temas. Hemos oído que Scott había renunciado a su contrato, pero es difícil saber si la historia es cierta, y además en ese punto tenía poca relación con DC y Wildstorm, así que, a decir verdad, no me he podido enterar de mucho. No sé lo que pasó realmente, pero lo que sí que te puedo decir es que sospecho que aunque tengo mis dudas sobre el comportamiento de Scott conmigo y con Kevin, diría que ha sido el cabeza de turco, y es probable que un montón de las cosas de las que se le ha culpado no fuesen problema suyo.
En cierto momento casi parecía como si el departamento legal de DC estuviese intentando dar a entender que apenas se había dado cuenta -dos libros después de que el primero se hubiese impreso- que The League of Extraordinary Gentlemen es un trabajo lleno de referencias a obras literarias y que está repleto de alusiones culturales, y creo que después de haber publicado los dos volúmenes anteriores, bien se podría pensar que lo podían haber supuesto. Como he dicho antes, esto sugiere o bien un nivel casi increíble de analfabetismo e incompetencia o cierto grado de mezquindad y malicia. En cualquier caso, desde luego que hemos decidido nuestro curso de acción para el futuro, que es que si queremos seguir haciendo obras de la complejidad de Black Dossier (y ciertamente quiero hacerlas), entonces creo que en el mainstream del cómic americano no tenemos espacio, porque no creo que sean lo suficientemente competentes como para publicar obras de este nivel.
He de decir que, obviamente, todo esto ha arrojado ciertas brumas sobre Dossier Negro, lo que sospecho que era el propósito de todos los sucesos anteriores. Pero por otro lado es una de las cosas más complejas, hermosas e inteligentes que Kevin o yo hayamos hecho nunca. A pesar de los puntillosos pequeños cambios, para las personas de Estados Unidos que se lo lean será una de las cosas más maravillosas que hayan visto en su vida, al menos en el medio del cómic, eso si este tomo sigue formando todavía parte del medio del cómic. Como he dicho, a mí me parece un nuevo formato, como si hubiese mutado hacia otra cosa. También debo señalar que la forma en que el volumen se va a publicar el 14 de noviembre será en una edición en tapa dura de tamaño normal que no contendrá el single de vinilo de siete pulgadas. Esto nos lo anunciaron poco después de que hubiésemos dicho que no queríamos que los futuros volúmenes de La Liga se publicasen en el sello de Wildstorm, así que nos dijeron que los más probable era que no incluyesen el single, que primero editarían un tomo más pequeño y luego, tal vez un año más tarde, lanzarían la edición Absolute con el single. No es la forma en que habíamos previsto editarlo, y en realidad tampoco parece tener sentido. Me refiero a que en las publicaciones normales, las publicaciones adultas, es habitual editar primero la edición de lujo y luego la edición más barata. Creo que el sentido común dicta que esa sea más o menos la forma de publicar las cosas. Pero al final decidieron cambiar los planes y sacar primero la edición más barata. Cuando se dieron cuenta de que estábamos bastante cabreados por todo esto, intentaron apaciguarnos de forma tardía y ridícula, sugiriéndonos que sacarían la edición Absolute con el single de vinilo al mismo tiempo que la edición más barata, lo cuál tampoco tenía sentido alguno. Así que acabamos por decirles que no, que mejor que lo dejaran. Dejad que el barato salga primero y luego ya saldrá la edición Absolute con el vinilo en la primavera del próximo año. Así los lectores tendrán que esperar para escuchar mi meliflua tonalidad en la doble cara A, o quizá doble B, que irá incluida en la edición más grande.
Como ya he dicho, mis sentimientos sobre el libro son un poco conflictivos. Aparecerá en una edición menor de la que originalmente habíamos ideado y que nos dijeron que iban a publicar. Inevitablemente el proyecto ha perdido algo de brillo. Pero dicho esto, creo que es una obra fenomenal. Acabo de hablar con Kevin sobre el tema, y la cantidad de diferentes estilos artísticos que ha utilizado a lo largo del tomo es simplemente impresionante. Su dibujo pasa por los pastiches de los grandes dibujantes políticos del Siglo XVIII hasta llegar al estilo de los ilustradores del Siglo XIX como el del Marqués Von Bayro, y de toda una enorme plétora de dibujantes que utilizaron otros estilos de ilustración, aunque siempre puede verse que es Kevin de forma inconfundible, pero su capacidad para ampliar su estilo de dibujo para el tomo me parece sencillamente asombrosa. También estoy bastante contento con el aspecto literario. Me refiero a que los dos podemos alardear de Black Dossier todo lo que queramos. La historia es en sí misma increíblemente convincente y va enlazada con un montón de hilos de ficción de la década de 1950 de Gran Bretaña y América, y hasta cierto punto, también del paisaje de ficción posterior de los sesenta. Pero las diferentes partes del Dossier Negro... (que aunque me refiera a él como "libro guía", realmente no describe adecuadamente todas las secciones que hemos incluido), quiero decir… hay un argumento inédito de Shakespeare, una novela de Jeeves y Woooster de P. G. Wodehouse, y una continuación de Fanny Hill titulada “The Further Memoirs of a Woman of Pleasure”, que con suerte se publicará con los bordes de la página para recortar, al estilo de los libros victorianos antiguos, cuando los lectores podían cortarlos ellos mismos. Y creo que la narración de la que estoy más orgulloso es de un pastiche de Jack Kerouac, una novela pseudo-beat completa con una portada pulp que tiene muy poco que ver con el interior, dibujada por Kevin. Se llama "The Crazy Wide Forever", estoy bastante contento de cómo ha quedado la escritura de esa historia. Y hay un buen montón de cosas más. Como he dicho, todo trata sobre lo que el lector de La Liga se había preguntado alguna vez, contado de una forma deslumbrante. Aparece la vida de Orlando en 24 páginas, recontada al estilo de uno de esos tebeos clásicos con muchachos británicos, donde aparecen hermosas obras de arte pintadas con el estilo de gente como Don Morris y Frank Bellamy. Y contamos la historia de Orlando desde su nacimiento en la antigua Tebas en el Siglo XII antes de Cristo hasta la Segunda Guerra Mundial, y al hacerlo también proporcionamos un calendario detallado con la totalidad de nuestro mundo de ficción, parecido al detallado mapa que ofrecimos en nuestro almanaque del segundo volumen. Así que todas estas cosas están hacinadas en un par de cientos de páginas. Más o menos la longitud de un tomo. Y creo que todas estas cosas, demasiadas como para listarlas aquí, son bastante notables. Creo que en muchos sentidos este libro es otro nivel completamente novedoso. Parece que con Black Dossier nos hayamos adentrado en un nuevo territorio que seguiremos investigando en nuestro próximo tercer volumen en Top Shelf.
Creo que Dossier Negro es muy interesante, porque marca todo un punto de transición radical. Quiero decir, estamos saliendo de ese territorio que nos resulta tan familiar y obviamente muy comercial de la época victoriana. Nos hemos deshecho de los personajes más populares y visuales, como Mr. Hyde, el Hombre Invisible y el Capitán Nemo. Es territorio completamente nuevo.
En cuanto empezamos a explorar el paisaje de ficción de la década de 1950, nos dimos cuenta de que era tan exótico y tan maravilloso como el de la época victoriana. Por otro lado, cuando estábamos haciendo nuestra historia victoriana nos vimos bastante limitados al tener que utilizar las figuras literarias de la época. Ahora, a medida que avanzamos por el S. XX con el primer libro del nuevo volumen 3 de La Liga, situado en 1910, estamos en condiciones de utilizar elementos del Teatro de la época y de algunas de las primeras películas mudas de ese período. Y por supuesto, a medida que nos acerquemos a 1958 tendremos disponible una gran cantidad de series de televisión y películas a las que podemos hacer referencia y utilizar personajes y situaciones de las mismas. Así que fue muy interesante hacer Dossier Negro y ver que sí, que estos personajes -este concepto- también funciona en el mundo moderno. Me refiero a que funciona en la medida en que 1958 es un poco más parecido al mundo moderno que 1898.
(Continuará)
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